Las empresas del 22@ piden a Colau un plan para relanzar la actividad económica
Los empresarios creen que el consistorio debería agilizar las tramitaciones para facilitar nuevas iniciativas
Los empresarios del 22@ piden al Ayuntamiento de Barcelona que ponga más el foco en el impulso final de la transformación del área norte del distrito tecnológico del Poblenou. Por eso, plantean que apruebe un plan específico, similar al que se tomó hace unos meses para promover un cluster de las industrias creativas. Las empresas demandan a la alcaldesa, Ada Colau, recuperar la sociedad municipal del 22@ —eliminada en el mandato de Xavier Trias— para dar una visión de conjunto, coordinar y, sobre todo, agilizar los proyectos.
El consistorio está decidido a impulsar una modificación urbanística en esa zona del Poblenou— el triángulo que forman la Diagonal, la calle de Perú y la Rambla Prim— para dotar de más viviendas esa área, y pasar del 10% actual al 30% del suelo destinado a uso residencial. Los empresarios del 22@ lo ven bien pero alertan de que el incremento de la vivienda no tiene que desvirtuar el ADN de esa zona que es la actividad económica. “Estamos en un momento muy importante y hace falta acelerar la culminación y facilitar la llegada e instalación de las empresas. El 22@ es un proyecto de ciudad que debe activar la economía global y vemos que el sector privado está jugando la partida y creemos que el Ayuntamiento debería poner el foco”, sostiene Xavier Monzón, presidente de la asociación 22@Network, que agrupa a 150 empresas.
El 22@ se lanzó hace casi 20 años a impulso de los gobiernos socialistas de la ciudad para reconvertir el antiguo distrito industrial del Poblenou en el de las nuevas tecnologías. Tras unos años titubeantes a su inicio —al tiempo de la apertura total de la Diagonal hasta el mar— la transformación se ha realizado a dos velocidades: más rápida por debajo de la Diagonal desde Glòries hasta el Fòrum, y mucho más lenta —en algunas zonas parada totalmente— en el triángulo superior, al norte de la Diagonal y hasta la Rambla Prim. En conjunto, ahora hay unas 9.000 empresas —incluye la actividad hotelera— que han generado alrededor de 100.000 puestos de trabajo. La ejecución de la totalidad del 22@ —unas 200 manzanas— se calcula en torno al 60%.
Ventanilla única para ganar agilidad
Los empresarios de la asociación del 22@ apuntan que en el día a día hay muchas pegas a solventar, que hay licencias y trámites que se acumulan y que algunas iniciativas se malogran: “Necesitamos una ventanilla única para todos los trámites y una gobernanza municipal que no sea solo para cuestiones urbanísticas sino también atienda lo relativo a la actividad económica. Creemos que habría que rescatar el espíritu de la sociedad municipal en la que deberían estar todos los actores implicados en la dinamización del 22@, desde las empresas, las universidades y las entidades vecinales y sociales”, sostiene Xavier Monzón.
Las grúas están empezando a ser más visibles en la parte del 22@ que ha tardado en despegar y para los próximos años hay varias operaciones de calado. La firma Hines and Henderson construye dos residencias de estudiantes de 700 y 300 habitaciones y Valeo otra más, de 300 habitaciones. Las tres estarán en esa zona norte del 22@, cerca de la Rambla Prim: “Supone la llegada de más de 3.000 estudiantes a partir de 2021. Son estudiantes que no limitan su estancia a meses sino que cursarán años de carrera. Eso provocará cambios importantes en los barrios y aflorarán algunos déficits, como el transporte público”, afirma Monzón. La estación de metro más cercana es Besòs Mar y hasta la del Fòrum no hay más conexiones rápidas.
Otros proyectos ya aprobados y que se encuentran en distintas fases de tramitación supondrán el incremento de más de 5.500 personas que trabajarán en esa zona del 22@ con un horizonte de 2023. Se trata de un gran edificio de oficinas que promueve Meridia, de 25.000 metros cuadrados, sobre el eje de Pere IV, y otro de Barcelonesa Inmuebles, de más de 30.000, entre las calles de Marroc, Cristóbal Moura y Selva de Mar. En esa zona del Poblenou, el trabajo de todo tipo de máquinas y excavadoras es perceptible. Y junto al parque central del Poblenou también se ha puesto en marcha una de las operaciones pendientes, que se quedó paralizada por la crisis económica, en la manzana que ocupaba la antigua fábrica textil de Can Ricart en la que se trabaja en los cimientos de otro edificio de oficinas.
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