El sector inmobiliario mira a la gran Barcelona

En una semana convulsa por las protestas contra la sentencia del juicio del procés, la capital catalana ha inaugurado este miércoles el salón inmobiliario Barcelona Meeting Point, y ha surgido otra de las problemáticas actuales de la ciudad: la dificultad para acceder a la vivienda. En el exterior, una protesta de la Plataforma de Afectados por las Hipotecas y del Sindicato de Inquilinos ha marcado las primeras horas del salón. Dentro, el delegado del Estado en el Consorcio de la Zona Franca de Barcelona (CZFB), Pere Navarro, organizador del evento, daba el pistoletazo de salida a un salón que quiere reflexionar sobre el derecho al acceso a la vivienda y aportar soluciones.

Según los organizadores y las empresas presentes en el salón inmobiliario, las soluciones se resumen en dos: afrontar el problema de la vivienda desde una óptica metropolitana, asumiendo que ante la saturación de la ciudad de Barcelona habrá que construir los nuevos pisos en las ciudades colindantes; y impulsar la colaboración entre administraciones y empresas para ampliar un parque de pisos públicos que se sitúa actualmente en un 2%. “Es un problema complejo al que solo se puede dar una respuesta con la colaboración público-privada”, ha dicho Navarro.

Al salón, que se celebra hasta el sábado, han acudido 280 empresas de 26 países distintos, y acogerá 50 sesiones de conferencias sobre los debates actuales del sector inmobiliario. Uno de ellos es la obligación de que los promotores destinen un 30% de las nuevas promociones en Barcelona a pisos sociales. Desde que lo aprobó hace un año el Ayuntamiento de Barcelona, los privados han criticado la medida y aseguran que está provocando una caída de la construcción y la rehabilitación en la ciudad. “Necesitamos que haya diálogo con las administraciones, sobre todo para hacer vivienda asequible”, afirma Lluís Marsà, presidente de la asociación de promotores APCE.

El mercado inmobiliario en general en Barcelona tiene dos velocidades: las cifras récord en demanda e inversión en oficinas y espacios de logística, y la vivienda de compra, que sufre una disminución en transacciones y un frenazo en los precios. “La parte residencial también tiene dos velocidades, porque mientras la de compra se enfría, crece la inversión para poner inmuebles en alquiler”, explica Anna Esteban, directora de la consultora CBRE.

Ante la saturación del mercado en Barcelona, en los puestos de las inmobiliarias, las grandes protagonistas eran las promociones en el área metropolitana. Un ejemplo es Neinor, una de las compañías que más crecen en el sector, y que ofrece en el salón más de 1.100 viviendas, la mayoría en ciudades como Sabadell, Montcada i Reixac o L’Hospitalet de Llobregat. Por su parte, la inmobiliaria Engel&Völkers ha destacado que el frenazo en las compraventas y los precios en Barcelona les ha llevado a ampliar su presencia en los alrededores: en la cartera que presenta en el salón se percibe un incremento del 23% de transacciones realizadas en las ciudades periféricas.