El escaparate escénico de la Fira vuelve renovado a Tàrrega

Como cada segundo fin de semana de septiembre desde 1981, el municipio de Tàrrega (l'Urgell) será, desde el 5 al 8 de este mes, de nuevo el epicentro de la 39ª edición de FiraTàrrega, el mercado internacional de las artes escénicas, con una heterogénea programación y una transformada Llotja (1.200 metros cuadrados y 70 casetas), el espacio profesional donde se da cita el intercambio artístico, un escaparate de la creatividad del teatro contemporáneo. La edición de este año, que contará con 800 profesionales procedentes de los cinco continentes y con un total de 42 propuestas escénicas, de las cuales más de la mitad (24) son catalanas, abre nuevos horizontes con una renovada dirección encabezada por Anna Giribet.

El objetivo de la feria, según sus promotores, sigue siendo el de “dinamizar el mercado artístico y generar alianzas estratégicas para desarrollar circuitos y producciones transnacionales en la calle”. Este año FiraTàrrega se interesa especialmente por el proceso de inserción de las propuestas en el mercado y por garantizar su pervivencia y viabilidad más allá del acontecimiento anual.

De esta manera, se ha continuado y potenciado el programa Suport a la Creació, que acoge el 30% del total de obras que participan en la feria, y en el cual se encuentran, por ejemplo, Livalone —que trata las dificultades de los jóvenes para emanciparse en Barcelona—, llevada a escena y protagonizada por Francesc Cuéllar, y el espectáculo multidisciplinar con historia de superación La crisi de la imaginació, de la compañía Rauxa, además de otras 12 representaciones escénicas más.

El jueves 5 de septiembre FiraTàrrega ofrecerá el acto de apertura en la Plaça Major. Será una conversación sobre el espacio público y la creación artística a cargo de la coreógrafa y bailarina Àngels Margarit, directora del Mercat de les Flors, y el filósofo Xavier Antich. Seguidamente, la compañía DelRevés realizará una acción artística de danza vertical.

En los siguientes días, y hasta el domingo 8, la imaginación escénica se desplegará en la población con obras que muestran, según la organización, las necesidades, inquietudes y retos de la sociedad actual. Lo harán en cuatro líneas temáticas: el territorio, la identidad, el compromiso social y la reflexión.

Diálogo artístico

En la temática territorial de la programación destacan A Vore, un diálogo entre la danza y la música tradicional y contemporánea sobre la cultura popular de las Terres de l'Ebre, dirigido por Sònia Gómez y Ramon Balagué y Trópico de Covadonga de Rodrigo Cuevas, un espectáculo planteado como un cancionero popular que recurre a la electrónica y el humor para narrar las historias del folclore.

Sobre la identidad podremos encontrar la advertencia sobre los estereotipos en el gimnasio, así como la obsesión por la imagen en Give me protein, producida por Kernel Dance Theatre.

Excalibur, una sátira de la sociedad que hace evidente las estructuras de poder y la política del miedo y del control, de los Hermanos Picohueso, será de lo más relevante por lo que respecta al ámbito del compromiso y la responsabilidad social; mientras que Mission Roosevelt, de los británicos Tony Clifton Circus, una acción colectiva sobre las capacidades y las barreras urbanas, y Suite TOC núm 6, la última obra de la compañía Les Impuxibles, que trata sobre el estigma y las convenciones de una sociedad sana, serán de lo más representativo en el espacio con mayor contenido de reflexión de la feria.

El público infantil y juvenil también podrá asistir a representaciones escénicas especialmente pensadas para ellos, como La lluna en un pot (un espectacle incomprès) de La petita Malumaluga, una reflexión crítica de las programaciones dirigidas a la primera infancia, o La ballarina, el espectáculo de las marionetas holográficas de Holoqué, que cuenta la historia de amor prohibido entre la música y la danza.