“El alcalde se debe implicar ya en la investigación biomédica”

Meritxell Mollà es oncóloga radioterapeuta del hospital Clínic de Barcelona.

Pregunta. ¿Qué le pide al nuevo alcalde de Barcelona?

Respuesta. Que gobierne por la gente de Barcelona. Que haga políticas que mejoren nuestra calidad de vida, que garantice que cada barrio tengan movilidad adecuada, que dispongan de guarderías y equipamientos deportivos, zonas verdes. Y que lo hagan pensando a largo plazo y no en políticas cortas pensadas para la reelección.

P. ¿Cuál es el principal problema de Barcelona y cómo combatirlo?

R. La movilidad es muy importante porque las redes ortogonales no tienen en cuenta las conexiones de cada barrio. Se han de hacer las políticas hablando con la gente. El segundo problema es la inseguridad. Barcelona ha de ser una ciudad modélica en seguridad y civismo y en tolerancia cero a las agresiones. Como mujer y como madre, estoy muy preocupada por la inseguridad a raíz de ciertas políticas judiciales como el tema de La Manada. Tenemos que garantizar que nuestros hijos estén protegidos y son necesarias políticas de prevención, aumentar la presencia policial y usar nuevas tecnologías para avisar en cualquier momento que haya situación de peligro.

P. ¿En qué barrio vive y en qué barrio le gustaría vivir?

R. Vivo en la Eixample Esquerra y me gustaría vivir en el Eixample, en la Dreta o en la Esquerra. Es un barrio donde me siento muy cómoda.

P. ¿Cuál debe ser el gran proyecto de la ciudad en los próximos años?

R. De formación profesional, es importante un esfuerzo por todo el tema de la investigación en biomedicina. Si queremos mantener a Barcelona al nivel de excelencia mundial en investigación, es imprescindible disponer de espacio y recursos. Y el alcalde se ha de implicar urgentemente en este tema.

P. ¿Está a favor o en contra del turismo?

R. A favor. Yo soy turista, he ido a muchas ciudades. Barcelona es preciosa y entiendo que la gente quiera venir a verla.

P. ¿El mejor lugar de Barcelona?

R. Yo diré un lugar, unas vistas y un edificio. El lugar es la plaza del Rey: pasear por allá me recuerda la historia medieval de Barcelona. Un edificio, el Palau de la Música, para sentarse y observar todo, las luces, las columnas, la cerámica. Y las vistas, desde las escaleras del Museo de Arte de Cataluña, la vista de Barcelona es preciosa y una parada obligatoria es el pabellón Mies van der Rohe de la Exposición Universal.