A Coruña aprueba retirar el título de Hijo Adoptivo a Fraga 11 días después que Ferrol

Han tenido que pasar casi cuatro años pero a salto de mata, entre elecciones generales y campaña municipal, el pleno de A Coruña ha aprobado hoy una moción del Bloque Nacionalista Galego que insta al alcalde a retirar a Manuel Fraga y a Laureano López Rodó sus correspondientes títulos de hijos adoptivos. Marea Atlántica, PSdeG y BNG han sumado 17 votos a favor frente a los 10 en contra del PP, una mayoría mucha más holgada que la que el pasado 25 de abril bastó para retirarle los honores en Ferrol al exministro de Franco y expresidente de la Xunta. La iniciativa parte de un manifiesto aprobado por un colectivo de presos del franquismo que reclama la revocación de los títulos honrosos que le llovieron a Fraga en los años 60 por sus servicios al caudillo y su poder creciente dentro de la dictadura.

"Estamos ante un hecho histórico", ha celebrado después del pleno en María Pita uno de los ex presos políticos que promovieron el manifiesto, Manuel Monge. Hasta ahora, según él, la figura de Manuel Fraga parecía intocable, pero las dos ciudades, primero Ferrol y ahora A Coruña, han tenido en cuenta que el nombramiento de Hijo Adoptivo no se había acordado por los años democráticos del político de Vilalba, sino por "su pasado falangista" y sus méritos en la dictadura. Fraga sigue siendo Hijo Adoptivo de Santiago, de Verín, de Cervo, de Pontedeume, de Cedeira y de Tui, además de Hijo Predilecto de su localidad natal. La Diputación de A Coruña también mantiene en vigor el título de Hijo Adoptivo de la provincia.

El acuerdo, calificado como una "provocación sectaria" por el Partido Popular, insta al alcalde, Xulio Ferreiro (Marea Atlántica), a presentar una propuesta de revocación, con un expediente motivado, para retirar a Fraga la distinción otorgada el 24 de diciembre de 1968, y a López Rodó (también exministro franquista y uno de los "siete magníficos" de Alianza Popular), el 15 de mayo de 1972. Un segundo acuerdo encomienda al regidor la retirada de honores a los alcaldes que participaron en la sublevación militar del 36, que "jugaron un papel destacado en la represión" o que "ocuparon puestos de responsabilidad en la dictadura" y cuyos retratos siguen luciendo en la zona noble del Ayuntamiento.

Monge recuerda que en octubre de 2015 Xulio Ferreiro anunciaba que iba a buscar "el mayor consenso posible" antes de despojar a Fraga de su título. "Os tempos son chegados", celebra este exedil del BNG, "despues de 43 meses de esas declaraciones y tras 26 meses de que el pleno aprobase constituir la Comisión Municipal da Memoria Democrática".