El Barça expulsa a 33 socios y sanciona a 2.700 por la reventa de entradas
El club se querellará contra las empresas de la red dedicada al fraude masivo
El Barça se ha marcado como prioridad luchar contra el fraude de la reventa de entradas. El club ha anunciado que echa a 33 socios y sanciona a otros 2.789 por haber puesto a disposición de terceros sus abonos para elaborar y vender entradas falsas para el clásico del Barcelona contra el Real Madrid del pasado 6 de mayo. Los socios expulsados son reincidentes, explicó este jueves el portavoz de la entidad, Josep Vives.
Al resto de sancionados se les aplica suspensiones de un año y medio (1.673 socios), un año y dos meses (481), diez meses (511) y medio año (124), en función de si han colaborado con la investigación interna del club, si han facilitado datos de las empresas a las que cedieron sus abonos y si han indemnizado a la entidad por el perjuicio ocasionado. En solo una jornada, el Barça calcula que perdió aproximadamente 1,5 millones de euros por los asientos libres que no pudo poner a la venta, una práctica que se lleva a cabo cuando un abonado avisa de que no asistirá a un partido.
La medida disciplinaria adoptada por la directiva es excepcional. Hasta ahora, el club no había impuesto sanciones que afectase a tantos socios de forma simultánea por la reventa, según explicó Vives. Durante el tiempo de suspensión, el Barça comercializará los abonos, y las plazas de los expulsados se pondrán a disposición de las personas inscritas en la lista de espera para ser socio.
Con el material que han aportado los socios que han colaborado con la entidad, el Barça prepara una querella criminal, que presentará contra “personas físicas” y “empresas”, según indicó Vives, implicadas en la trama. La información obtenida, dijo, le ha servido al club para conocer la red que operaba alrededor del Camp Nou. Pero declinó facilitar detalles de las entidades y de su alcance para, según dijo, preservar la investigación.
La Fiscalía Anticorrupción abrió diligencias el pasado mes de mayo, después de que el Barcelona informase de la operación anti reventa que llevó a cabo en el estadio. Implicaron a más de 120 trabajadores, que comprobaron una a una las entradas, y detectaron que algunas de ellas incluían códigos QR que pertenecían a abonos de socios del club, y que a su vez, el precio de venta que figuraba no se correspondía con el marcado por el club.
Precios astronómicos
En esa redada, los trabajadores del Barça constataron también que la estafa se había llevado a cabo con el beneplácito de los asociados, porque ninguno de ellos asistió al estadio para ver el clásico. De haber sido así, habrían saltado las alarmas porque una de las dos personas —el portador de la entrada falsa o el dueño del abono— no habría podido acceder a las instalaciones ya que tenían el mismo código de entrada. Vives tampoco aclaró las cuantía de las ganancias obtenidas por los socios a través de estas prácticas. Y aseguró que, en los casos en que los abonados han admitido la estafa, las cantidades que recibieron por hacerlo son distintas, por lo que no se puede establecer una cifra media.
La reventa de entradas es uno de los clásicos del mundo del fútbol. Existen diversas páginas webs en las que se pueden conseguir las entradas para los encuentros con más demanda, algunas a precios astronómicos. En los foros de Internet en los que se trata el tema, ya se explica que habitualmente esas páginas operan con los abonos de socios que los prestan, previo pago de una comisión por la venta.
Ahora la Guardia Civil tiene abierta una investigación por orden de la Fiscalía, y está llevando a cabo las primeras diligencias de investigación. El Barça ha facilitado ya todos los datos que obran en su poder, con nombres de empresas y sociedades. Por su parte, los socios tienen 40 días para presentar alegaciones ante la decisión del club de expulsarles o bien de suspender su abono.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.