Podemos denuncia el aumento de las suspensiones de la Renta Mínima de Inserción

En la Comunidad de Madrid cobran la Renta Mínima de Inserción (RMI) 29.979 familias que perciben una cuantía media mensual de 468 euros. Para ser perceptor es necesario cumplir una serie de requisitos que se compendian en carecer de recursos económicos suficientes para hacer frente a las necesidades básicas de la vida. El diputado de Podemos Raúl Camargo ha denunciado hoy en el pleno de la Asamblea de Madrid que están aumentando de una forma muy preocupante las suspensiones de la renta. Hasta noviembre se han producido 6.254 suspensiones, mientras que el año pasado fueron 4.899 personas las que se dieron de baja en total. Con estos datos, la media mensual de suspensiones en los seis primeros meses de 2016 fue de 343 y en el mismo periodo de este año de 590.

El consejero de Políticas Sociales y Familia, Carlos Izquierdo, ha reconocido la subida de las suspensiones, pero ha destacado que el  47% de estas situaciones se debió a que los perceptores encontraron un puesto de trabajo, mientras que el 18% no presentó la documentación requerida. Camargo ha rechazado la explicación del Gobierno y advierte que solo el 35% consiguió empleos por más de un mes. Con independencia de que los contratos abarquen un periodo más o menos largo (un año, un mes o menos), los perceptores dejan de percibir la renta que luego tienen que volver a solicitar.

El parlamentario ha asegurado que el espectacular incremento tiene su origen en que la Comunidad ha ajustado sus procedimientos para que no se dispare el importe que destinan a este fin. "Solo hay que ver cómo ha crecido el gasto en esta partida: 120 millones en 2016, 160 en 2017 y 169 para 2018", ha argumentado. Con esas cifras en ascenso, "han dado orden de que esto no puede seguir así". Su argumentación se apoya en que la situación de los más vulnerables continúa siendo dramática. Los datos del Instituto Nacional de Estadística indican que en la región viven 400.000 personas en pobreza severa y 1,4 en riesgo de caer en ella.

El consejero ha indicado que "no es una renta básica universal". Se trata de una "una prestación económica que se cobra cuando las circunstancias de la familia son extremadamente malas y no pueden afrontar sus necesidades básicas". La renta mínima se regula por ley en función del cumplimiento de unos requisitos, de tal forma que si no se cumplen "se suspende" la prestación, ha concretado.

El Gobierno regional está trabajando en la modificación de la ley que regula la RMI. Pretenden que la actuación sea diferente dependiendo de la persona a la que se dirija, según su grado de formación o con programas personalizados. Otra de las cuestiones a mejorar es el tratamiento dependiendo del puesto de trabajo que se consiga, para evitar que si se consigue un empleo por poco tiempo o no se coja o no se diga porque se perdería la RMI sin que interese debido a la brevedad del contrato.