El Minotauro está en el Retiro

Acercaos, atenienses. Tenemos un problema: el mundo está lleno de monstruos”. Así empezó la VI Yinkana Mitológica, que congregó el pasado sábado en El Retiro a más de 300 alumnos de ESO y Bachillerato de colegios de la Comunidad de Madrid, Talavera de la Reina y Esquivias (Toledo).

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La iniciativa, impulsada por la organización Madrid, Capital del Mito, consistía en que los jóvenes tenían que superar diversas pruebas repartidas por el parque. En donde se hallaban estas, debían contestar a varias preguntas teóricas sobre Teseo, el rey de Atenas (el tema de esta edición), además de superar un reto físico.

A las 12.00 comenzó la competición y todos los participantes comenzaron a correr apresuradamente en todas las direcciones. Las primeras en llegar a uno de los puntos de control fueron las integrantes del equipo de Las Amazonas, que consiguieron superar el reto a menos de un segundo del tiempo estipulado. “¿Quién se enamoró de Teseo cuando llegó a Creta?”. “Ariadna”, respondieron. Ana María, una de las coordinadoras, les preguntó entonces: “Ariadna ayudó a Teseo a salir del laberinto facilitándole un ovillo de hilo, Teseo se la llevó consigo y ¿en qué isla la abandonó?”. Una vez acertadas las respuestas, tuvieron dos minutos para encontrar en una caja las letras que forman las palabras Ariadna, Teseo y Naxos y enhebrarlas en un hilo, una por una.

A pocos metros, otros participantes intentaban conseguir puntos en una prueba que tenía como escenario el laberinto ubicado en la Rosaleda. “¿Quién construyó el laberinto de Creta?”, preguntaba una de las voluntarias de Madrid, Capital del Mito, a los participantes. “Lo construyó Dédalo para esconder al Minotauro”, contestaban los chicos después de algunos titubeos.

Tras las preguntas, tres miembros de cada equipo tenían que caminar unos metros con las piernas pegadas con cinta aislante a las de otro compañero, además de que no podían emitir ningún sonido. Muy pocos superaron el reto porque la risa entre ellos fue inevitable.

A las 13.30, cuando finalizaba la competición, varios grupos intentaban arañar puntos en la prueba del mar Egeo y el rey homónimo. “¿Por qué se suicida Egeo, el padre de Teseo?”, preguntaba uno de los monitores al grupo Safearum Thesauri, integrado por Melisa, Natalia, Miguel, Ángel y Vanesa. Los jóvenes acertaron la respuesta y explicaron que, como cuenta la leyenda, “Egeo se lanzó al mar pensado que su hijo Teseo había muerto en el reino de Minos intentando matar al Minotauro”.

Ya muy cerca de la plaza de Galicia, situada cerca del lago, el punto de encuentro final, los participantes apuraban el tiempo intentando encontrar en un jardín las sandalias y la espada de Teseo para entregárselas al rey Egeo, que estaba perfectamente encarnado por un miembro de la organización, con corona y capa incluidos.

El equipo Theseus Basileus fue el vencedor de la iniciativa, patrocinada por la Sociedad Española de Estudios Clásicos. La victoria fue reñida y se decidió mediante un duelo de preguntas sobre mitología.