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Día Internacional contra Violencia Género

Feminismo para todos los públicos

Cinco obras con ellas de protagonistas y dos conciertos de grupos femeninos convergen en la capital

Carmen Machi en la obra 'Juicio a una zorra', dirigida por Miguel del Arco.
Carmen Machi en la obra 'Juicio a una zorra', dirigida por Miguel del Arco.Sergio Parra

Con motivo de la celebración del Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer, convergen en Madrid una serie de planes en clave femenina. El Teatro Pavón Kamikaze están desarrollando el ciclo Femenino Plural (hasta el 29 de enero), una serie de cinco obras con las mujeres como protagonistas. Esta noche en la Sala Arena revolucionarán la noche las madrileñas cañís Las Chillers y las catalanas dedicadas al pop electro disgusting Las Bistecs. Por otro lado, el colectivo Las Brujas de Mayo queda para hablar de poesía en femenino, mientras que, dentro de las Jornadas Feministas Fuck Patriarchy! el público podrá asistir al taller Feminismo para torpes, “una clase de autodefensa verbal e intelectual en clave de humor ante las situaciones y opiniones sexistas que recibimos a diario”.

Protagonistas absolutas. Siempre pegado a los conflictos de todo tipo, a hacer de las tablas un lugar de discusión sobre lo que está ocurriendo en el mundo, el Teatro Pavón Kamikaze (Calle de Embajadores, 9) centra su mirada en la mujer. “Nuestra intención es dar visibilidad a la mujer en una sociedad que no es igualitaria ni paritaria, en un tiempo en el que nos hemos acostumbrado casi cada día a la noticia de la muerte de una mujer a manos de su pareja”, se lamenta Miguel del Arco, dramaturgo y uno de los cuatro socios fundadores de este espacio, que abrió sus puertas el pasado septiembre y que ya es uno de los focos teatrales más interesantes de la capital.

Voces clásicas y contemporáneas, femeninas y masculinas, se alzarán para debatir y reflexionar en torno a la situación de la mujer a través de cinco obras de teatro, además de charlas y conferencias. Las mujeres serán las protagonistas absolutas de aquí a finales de enero de la programación del Pavón Kamikaze, a través del proyecto Femenino Plural.

La homosexualidad femenina y la misoginia explosionan de manera poderosa en el escenario en La noche de las tríbadas, escrita por el dramaturgo sueco August Strindberg y que se estrena el próximo martes bajo la dirección de Miguel del Arco. Los espectadores serán testigos de la decisión y valentía de Siri, la primera esposa de Strindberg, y su supuesta amante Marie por defender un amor prohibido a finales del siglo XIX. Este montaje estará en cartel hasta el 8 de enero. La programación Femenino Plural empezó el pasado lunes con la emocionante lectura por parte de la actriz Irene Escolar de unos textos elegidos por ella de Federico García Lorca, en un monólogo, Leyendo a Lorca, con el que volverá al escenario el 6 y el 13 de este mes.

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“No hay verja, ni cerradura, ni candado que puedas imponer a mi libertad de pensamiento”. Virginia Wolf plasmó en Una habitación propia sus reflexiones en torno a la maltratada figura de la mujer en la historia del arte y la literatura y el movimiento feminista de principios del siglo XX. “¿Por qué los hombres beben vino y las mujeres agua? ¿Por qué un sexo es tan próspero y el otro tan pobre?”. Clara Sanchís pondrá voz a estas y otras palabras de la autora británica, que puso fin a su vida hundiéndose en las frías aguas del río Ouse, en 1941. Este montaje, dirigido por María Ruiz, estará en escena entre el 5 y el 26 de diciembre.

El amor y el desamor protagonizarán la cuarta obra de esta programación especial. La voz humana es un desgarrador texto de Jean Cocteau, en el que el autor francés reflexiona sobre el desamparo, la angustia y la dependencia de quien se siente abandonado. Con versión y dirección de Israel Elejalde, el monólogo de La voz humana (del 14 de diciembre al 6 de enero) correrá a cargo de la actriz Ana Wagener, que afronta este papel como un “paso al abismo muy liberador”. El punto final lo pondrá el grito de Helena de Troya, cabellera rubia, vestido rojo y altos tacones, cuya belleza desencadenó la más célebre guerra de la Antigüedad, en la reposición del exitoso y premiado montaje Juicio a una zorra (12 a 29 de enero), dirigido por Del Arco y protagonizado por una imponente Carmen Machi.

Las componentes de Las Chillers.
Las componentes de Las Chillers.

Pop “chochocentrista”. Lo que hacemos nosotras es chonismo ilustrado”, dice Rocío Saiz, cantante de Las Chillers, que actúan, junto a las catalanas Las Bistecs, esta noche en la Sala Arena (Princesa, 1; apertura puertas 20.00; 13,20 euros), dentro de la gira San Miguel Music Explorers. “Lo que tenemos en común ambos grupos es que somos mujeres y que lo que hacemos es divertido, desacomplejado, cero pretencioso, cero intenso y para todo el mundo”, cuenta Saiz, que reconoce haber recibido críticas “porque no somos profesionales”. Se refiere a que no tienen disco editado, que no se mueven en el ecosistema musical común… “pero vendemos entradas y la gente se divierte con lo que hacemos”, apunta.

Alba Rihe y Carla Moreno, componentes de Las Bistecs.
Alba Rihe y Carla Moreno, componentes de Las Bistecs.

A Las Bistecs les pasa algo parecido: “No te lo tomes en serio”, concluyen, a modo de epílogo, uno de sus temas. “Nos comparan con la Movida por nuestra faceta hedonista, pero nuestra influencia real son nuestras madres, MasterChef y otras facetas de la cultura popular”, cuenta el dúo. Así, uno de sus tema es una oda a las “señoras bien, señoras fetén; capitalistas, chochocentristas”.

“¿Por qué tenemos que esperar a las fiestas del pueblo o a una boda para disfrutar de la música que te apetece escuchar para ser feliz?”, se preguntan The Chillers. “Nosotras nos hemos quitado la careta. Ofrecemos formatos en los márgenes de la industria musical y la respuesta del público es venir siempre a los conciertos volverse locos y desgañitarse con nuestras versines de Mónica Naranjo y OBK. No se puede pedir más. En los conciertos de indie intenso no se suda, en los nuestros, muchísimo”, resume Saiz. “Las mujeres queremos nuestro sitio en todos los ámbitos, por supuesto también en lo puramente lúdico, en el desmadre, en no tomarse en serio, en abrazar lo choni y lo popular. Eso también es feminismo", añade.

Aquelarre poético. A Ter le gusta escribir sobre las Kardashian, a Sofía sobre las cosas que la mueven y a Rocío sobre sí misma. Las tres forman parte de Las Brujas de Mayo, grupo de chicas de 16 a 26 años que se reúne cada dos semanas para leer poesía y practicar lo que comúnmente se conoce como sororidad —forma de hermanamiento entre mujeres—. “Somos un colectivo de chicas que viven en Madrid y a las que les gusta reunirse para compartir su gusto por la literatura”, comenta Sofía, que en agosto del año pasado decidió tantear en Twitter quiénes estarían interesadas en juntarse para leer poemas. “Leemos cosas nuestras y también llevamos libros que nos gustan”, relata sobre este grupo formado por una veintena de autoras, la mayoría de ellas inéditas, donde se comparten también versos de Luna Miguel, Ana Carrete, María Mercromina, Sarah Jean Alexander o Sylvia Plath. De momento han realizado dos recitales públicos, además de una publicación en papel donde mostrar su poesía.

También en clave de sororidad, se celebra este fin de semana el festival Fuck Patriarchy! (desde hoy hasta el domingo) en Vaciador 34 (Calle de Matilde Hernández, 34). Además de charlas, microteatro o marchas, hay performance como la de la periodista y activista Nerea Pérez de las Heras, Feminismo para torpes (sábado a las 21.30). “La gente no suele prestar atención cuando hablas de feminismo. Y es algo importantísimo para la sociedad. Yo intento comunicarlo desde el humor”, afirma.

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