Puigdemont se codea con la Coronela

El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha recibido esta mañana en la plaza Sant Jaume a los Miquelets yla Coronela de Barcelona. El líder catalán ha aprovechado la polémica generada entre los integrantes de esta asociación de recreación histórica y el Ayuntamiento de Ada Colau y ha tomado el relevo dándoles el pistoletazo de salida a la marcha que ha desfilado por las calles de la ciudad.

El comisionado de Memoria Histórica del Ayuntamiento de Barcelona, Ricard Vinyes, denegó a la Coronela que desfilara saliendo de la puerta Gótica del Consell de Cent del Ayuntamiento de Barcelona. Los integrante de esta asociación, que se visten recreando a los milicianos de la ciudad de Barcelona de 1714, alegaron que desde hace cinco años realizan este recorrido que es el mismo que hizo Rafael Casanova el 11 de septiembre de 1714. La Coronela denunció que no es la primera ocasión que se les deniega el permiso ya que en la fiesta de Santa Eulalia del pasado febrero tampoco les dejaron marchar. El Ayuntamiento alegó que "la Diada es la jornada conmemorativa civil más importante de Barcelona y de la nación" y que "atendida la solemnidad" de un día tan importante, "no encaja (....) con un desfile de época". Los miembros de la asociación concluyeron que había mala fe por parte del consistorio.

Puigdemont les ha dado esta mañana la posibilidad de seguir marchando por la ciudad saliendo desde el edificio de enfrente de la plaza Sant Jaume. Poco después de las 10.00 el presidente ha recibido en el Palau de la Generalitat una representación de la asociación. El Consistorio siempre ha remarcado que no prohíbe a la Coronela realizar marchas pero que no les incluye en la agenda institucional de este año. Cosa que si ha hecho Puigdemont. Tras la recepción, la plaza Sant Jaume se ha convertido en un patio marcial. Se notaban los nervios entre los miembros de la asociación que trataban a gritos a los curiosos que se han acercado a ver al cuerpo paramilitar. Con Puigdemont como líder político se han efectuado diversas salvas y ha comenzado la marcha castrense en la que este año han participado un centenar de voluntarios y que les ha llevado a la confluencia de Ronsa Sant Pere y Alí Bei donde aseguran que cayó Casanova.

Antes de que la Comunela fuese recibida por el presidente de la Generalitat, los concejales de CiU, ERC y la CUP Barcelona han desobedecido la prohibición del Ayuntamiento y antes de que la asociación paramilitar fuese recibida por Puigdemont han permitido entrar a la zona gótica del Consistorio a una representación de la entidad castrense.

En la Diada de 2015, con Colau de alcaldesa, se realizó el desfile integro. Meses más tarde, el 22 de enero la sectorial de arquitectura de la Assemblea Nacional de Cataluña (ANC) se concentraron ante las puertas del Born Centre Cultural a las 17.14 para exigir a Colau que no modificara el modelo de equipamiento y realizara exposiciones fuera de la temática de 1714. El acto fue apoyado por los concejales de CiU en el Consistorio Jaume Ciurana, Jordi Martí y Sònia Recasens. Una pequeña representación de la Coronela desfiló entonces por dentro de la instalación en el acto contrario al consistorio.