El Aurrulaque pide paz para el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama
El manifiesto de la marcha anual señala la importancia del uso público amigable del parque nacional
La marcha del Aurrulaque ya hace muchos años ha pasado de ser solamente una reivindicación social, convirtiéndose en una tradición madrileña. Desde 1984, los amantes del Paque Nacional de la Sierra de Guadarrama hacen un recorrido que culmina en el mirador de Luis Rosales para defender este parque natural. Para el presidente de Amigos del Guadarrama, Antonio Sáenz de Miera, la asociación que organiza la marcha anual, lo sorprendente es que la actividad sigue teniendo éxito después de tantos años. “La gente va y va con ilusión. Es el milagro del Aurrulaque. Después de tantos años, seguimos siendo una marca que vende”, comenta emocionado Sáenz de Miera.
El próximo sábado, 9 de julio, a las 9.30, Sáenz de Miera estará en el Centro de Información de Las Dehesas/Cercedilla para ver una vez más el éxito del Aurrulaque. Con 81 años, el presidente de Amigos del Guadarrama afirma que todavía le queda mucho ánimo para participar de la marcha. “Yo sigo con la determinación hasta que no pueda más, esto me ilusiona muchísimo”, asegura. Este año, el paseo por los caminos de la Sierra de Guadarrama contará con la presencia del consejero de Medioambiente de la Comunidad de Madrid, Jaime González Taboada, además del alcalde de Cercedilla, Luis Miguel Peña y el presidente de la Sociedad Peñalara, Pedro Nicolás.
Este año el manifiesto será del escritor Julio Vías y se llama “Sierra de Guadarrama, por un uso público amigable”. Sáenz de Miera explica que lo que se va a denunciar con el manifiesto son, sobre todo, las manifestaciones colectivas que “perturban la paz de la Sierra y que cada vez más están contribuyendo al deterioro del ambiente”. Para el presidente de la asociación organizadora, esas manifestaciones colectivas son concretamente las carreras ciclistas y los grandes maratones. “Todo el mundo tiene el derecho de participar del Parque Nacional, pero consideramos que es peligroso que la competitividad se convierta en un factor determinante del disfrute de la sierra”, señala Sáenz de Miera, aunque invita a todos a participar de esta 32 edición del Aurrulaque. “Es una ocasión anual de reclamar un mayor respeto, mayor amor diría yo, por la sierra”, concluye.
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