Los perros no podrán estar atados más de dos horas en Barcelona
El Ayuntamiento destinará una playa para canes durante los meses de verano
Barcelona habilitará un espacio de 1.200 metros cuadrados para perros en un extremo del lado Besòs de la playa de Levante durante este verano, a partir del mes de junio. Para hacerse una idea, la zona será un poco más pequeña que un supermercado, que tiene una superficie media de 1.500 metros cuadrados. Esta medida, que será una prueba piloto, responde a una demanda histórica de las entidades animalistas. Hasta ahora sólo se podía ir a la playa con perros fuera de la temporada de baño. En la playa para perros sólo podrán entrar los animales censados y que lleven microchip. En la ciudad hay 70.000 perros y sólo 45.700 están registrados.
El espacio para perros en la playa, que estará delimitado por una valla de madera, es la gran novedad que dió a conocer ayer la teniente de alcalde de Ecología, Janet Sanz, al explicar en qué estado se encuentra el desarrollo de la Ordenanza de Protección y Tenencia de Animales. Esta ordenanza fue aprobada en 2014 por el gobierno del ex alcalde Xavier Trias y su principal punto obliga a atar a los perros en la calle, un punto que no se ha aplicado porque, de acuerdo con la norma, antes hay que habilitar áreas de recreo de más de 700 metros en todos los distritos. Sanz explicó también que prorroga la moratoria que obliga a atar a los perros por la calle hasta que estén listas las nuevas zonas específicas.
Perros también en el bus
La teniente de alcalde Janet Sanz valora "muy positivamente" la experiencia de más de un año de permitir que los perros viajen en metro, con bozal y ligados a menos de un metro de distancia del dueño. Y añadió que habrá que empezar a pensar a "ampliar" la autorización "a otros transportes públicos para garantizar el derecho a la movilidad de las personas que tienen perro".
Sanz y la comisionada de Ecología, Eva Herrero, explicaron que el actual gobierno municipal se compromete a crear las 10 áreas de recreo y que las “prioritarias” de nueva creación serán el parque de la Barceloneta (ésta ya está y se ampliará), Letamendi, Priorat, Jardines de Bacardí, avenida Vallcarca, Coll i Alentorn, Via Favència, Ferran Junoy y parque de San Martín.
Actualmente hay 107 espacios para perros en la ciudad, que suman casi 33.000 metros cuadrados. Las nuevas áreas de recreo incluso tendrán juegos para los perros. El coste de crear las 10 áreas y 73 zonas de uso compartido entre vecinos con y sin animales (zonas donde por la noche se podrán llevar desatados) será de tres millones de euros.
Además de regular los espacios a los que pueden entrar los perros, la polémica ordenanza también fija las atenciones mínimas que tienen que recibir las mascotas. La normativa impide, por ejemplo, que los perros estén más de dos horas atados (una en el caso de los cachorros) y no pueden estar solos en los domicilios más de 12 horas. En el caso de los gatos, solo pueden estar tres días solos. Todos los animales domésticos se tienen que comprar o adoptar esterilizados o con el compromiso de esterilización por contrato. Tampoco está permitido que tengan como alojamiento habitual los patios, terrazas o balcones. Se debe visitar el veterinario al menos una vez al año.
La ordenanza fue aprobada con los votos a favor de CiU, PSC y UxB (ERC). ICV-EUiA se abstuvo y el PP votó en contra. La principal crítica de los populares llega porque consideran que el texto “no se ajusta a la realidad porque carga de obligaciones a los propietarios, algunas de ellas absurdas, mientras que el Ayuntamiento es incapaz de asumir sus obligaciones”, según Alberto Fernández Díaz, líder del PP en Barcelona.
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