Cifuentes aprueba su primer presupuesto con el voto de Ciudadanos

La Comunidad de Madrid ya tiene presupuestos para 2016. El PP, con 48 diputados, ha necesitado en esta ocasión a los 17 representantes de Ciudadanos, imprescindibles para superar a los 64 representantes que suman PSOE, con 37, y Podemos con 27. Igual de vital ha sido la presencia de Ignacio Echeverría, que tras finalizar la sesión anunció su “dimisión irrevocable” por provocar un accidente y superar el nivel de alcohol permitido

Así ha salido adelante un presupuesto que asciende a 17.890 millones, lo que supone un incremento del 2,71% con respecto a 2015, cuando la cifra alcanzó los 17.418 euros. Se han aprobado unas 300 enmiendas de los diferentes grupos políticos, con un movimiento de unos 105 millones, según datos provisionales facilitados por el popular Enrique Ossorio. El político ha reconocido que este año el debate ha revestido mayor complejidad “por la formación política de la Cámara”. Es la primera vez que el PP precisa el voto de la oposición desde 2003  que gobierna la región.

El portavoz de Ciudadanos, Ignacio Aguado, ha señalado que su voto a favor responde a su intención de “hacer política útil”. La formación naranja supeditó su apoyo al compromiso por parte del PP de elaborar un plan estratégico que posibilite un cambio de modelo de gestión y la prestación de servicios públicos de mayor calidad. Lo han conseguido. El documento incluye más de 200 medidas, y se encuentra a la espera de financiación y desarrollo. Aguado concretó que se han marcado dos plazos para ello: marzo y mayo.

Los socialistas mantienen que el apoyo de Ciudadanos al PP confirma que se ha pasado del acuerdo de investidura a un pacto de gobierno. Podemos coincide con el análisis. Ángel Gabilondo, portavoz del PSOE, ha calificado las cuentas de continuistas, aunque “se han introducido mejoras gracias a las enmiendas”. El PSOE presentó 1.109 enmiendas de las que se han aceptado más de 120.

Gabilondo, portavoz del PSOE, ha calificado las cuentas de continuistas,

Se encuentran especialmente satisfechos del plan bucodental, de la derogación de artículos privatizadores de la sanidad o de las partidas para reformar hospitales y construir centros de salud. Sin embargo, han recibido algún varapalo, como la marcha atrás de Ciudadanos en una enmienda que detraía 2,9 millones a la enseñanza concertada y permitía destinar a infraestructuras de las universidades públicas 4,6 millones. La partida destinada a la concertada aumenta en 35 millones. “Así que, lamentablemente, no habrá ninguna cantidad para ellas”. Otro de sus peticiones no atendidas es conseguir que los grandes hospitales no perdieran 195,5 millones con respecto a lo que se gastaron en 2014.

Podemos incide en que los presupuestos llevan el sello sus predecesores. “Son una fotocopia de los de Ignacio González o Esperanza Aguirre”, sentenció el portavoz de la formación José Manuel López. También le ha parecido “muy simbólico”, que el nuevo PP haya necesitado del voto de un diputado que ha tenido que dimitir inmediatamente despué, Echeverría.

 A pesar de las críticas, López destacó las tres mejoras de las que se sienten especialmente orgullosos. Subir la renta mínima de inserción de 375 a 400 euros, mayores aportaciones a la Justicia (16 millones) y en vivienda impedir que el Ivima privatice inmuebles con la venta a fondos buitres. Podemos ha presentado 26 enmiendas de las que han conseguido apoyo para 17.

“Son una fotocopia de los de Ignacio González o Esperanza Aguirre”,

Una de las enmiendas de mayor cuantía presentada por toda la oposición de mayor cuantía fue la asignación de 17,5 millones a la Empresa Municipal de Transportes (EMT) para la renovación de la flota de autobuses. Comunidad y Ayuntamiento han mantenido discrepancias debido a la congelación del presupuesto a la EMT.

En cuanto al servicio médico de la Asociación de la Prensa de Madrid, se ha decidido mantenerlo durante los seis primeros meses de 2016. La presidenta regional, Cristina Cifuentes, ha advertido de que existen personas que están recibiendo tratamientos para enfermedades graves, por ejemplo en oncología, para las que es muy complicado cambiarse de centro médico.