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El Museo Picasso organizará una gran exposición sobre cubismo en 2016

La muestra, que reúne 80 obras del periodo, podría no inaugurarla el actual director, que concluye el mandato el próximo julio

José Ángel Montañés
'Naturaleza muerta con mandolina' (i) y 'Mandolina y guitarra', dos de las 60 obras que se vieron en la exposición comisariada por Green en 2008.
'Naturaleza muerta con mandolina' (i) y 'Mandolina y guitarra', dos de las 60 obras que se vieron en la exposición comisariada por Green en 2008. efe

Pablo Picasso y George Braque son los padres del cubismo, la primera de las vanguardias nacida en Francia de la primera década del siglo XX que acabó para siempre con la pintura del pasado, al prescindir de las perspectiva y pintar a base “pequeños cubos”. El propio Picasso comparó su trabajo en común, mano a mano con Braque, con el de los montañeros en una cordada a dos en el que descubrimiento de uno servía de elementos de superación al otro al pintar sus nuevas obras. A la pareja pronto se unieron otros como Jena Metzinger, Albert Gleizes, Juan Gris y Robert Delaunay. Picasso, su compañero de escalada Braque y muchos de sus colegas cubistas visitarán Barcelona el próximo año, según ha podido saber este diario. Será en la exposición Cubismo y guerra. El cristal en la llama,título de la muestra que celebrará el Museo Picasso de Barcelona, en la que se reunirán 80 obras realizadas, como respuesta al gran conflicto europeo, por creadores de la vanguardia establecidos en París durante la Primera guerra Mundial, entre 1914 y 1918.

La muestra, que será la estrella de la nueva temporada de exposiciones del museo barcelonés del artista que se presentará el próximo 17 de diciembre, estará centrada en tres artistas extranjeros residentes en Francia que por serlo no pudieron participar en el conflicto militar que afectó a casi todo el continente: el malagueño Picasso, instalado en la capital parisina de forma permanente en 1904 tras su paso por Barcelona; el madrileño Juan Gris, que se fue a vivir a París en 1906, donde comenzó a pintar ilustraciones para revistas, una actividad que abandonó a partir de introducirse en el cubismo en 1910, y el mexicano Diego Rivera, en la que será una de las pocas ocasiones en la que podrán verse en Barcelona obras de ese muralista famoso por su defensa del comunismo y por ser marido de otra pintora universal, Frida Kahlo. El comisario de la muestra será Christopher Green, profesor de historia del arte en el Instituto Courtauld, institución puntera en este campo vinculada con la Universidad de Londres.

La exposición, que podrá verse entre octubre de 2016 y enero de 2017, contará con obras también de otros artistas que vivieron las mismas circunstancias como María Blanchard, Gino Severini o Jacques Lipchitz o creadores franceses que por otras circunstancias no participaron en la contienda. Es el caso de Henri Matisse, que realizó algunas de sus obras más experimentales durante ese período, o Henri Laurens, considerado el mayor escultor francés del siglo XX. También explorará la respuesta artística a este periodo de dos de los grandes artistas cubistas como son Fernand Léger, que tras entrar en contacto con Picasso en 1907, comenzó a desarrollar un cubismo centrado en la iconografía de la máquina, o el mismo compañero de ascensión, Braque, un pintor y escultor sepultado por el peso del genial Picasso, pero que fue un puntal fundamental de la nueva vanguardia, que, además de llenar de formas geométricas sus naturalezas muertas, introdujo textos en las pinturas y creó el collage.

Aunque centrada en el periodo de la Gran Guerra, la exposición Cubismo y guerra. El cristal en la llama, mostrará obras creadas en un periodo mayor de tiempo, entre 1913 y 1919, según explica la página web del museo, y por lo tanto no se centra en el cubismo primero, el creado a partir de 1907, sino en un momento más tardío. El Museo Picasso ha organizado varias exposiciones sobre cubismo en la que ha mostrado distintas facetas de este movimiento, no siempre centradas en Picasso: En 1986 realizó una gran retrospectiva de Braque, en 1988 mostró una de las obras más importantes del periodo como son Las señoritas de Avignon, pintado por Picasso en 1907 y que, tras ser comprado por el MoMA en los años veinte del siglo XX, pudo verse cerca de donde el pintor se inspiró en una de las pocas ocasiones que la obra ha viajado desde Nueva York. En 1990, se organizó la exposición Cubismo en Praga; en 2001, otra sobre Albert Gleizes y en 2004 otra sobre Magnelli.

Christopher Green junto al director de entonces del museo, Pepe Serra, el día de la inauguración de la exposición de 2008.
Christopher Green junto al director de entonces del museo, Pepe Serra, el día de la inauguración de la exposición de 2008.Ronald Stallard

Para la exposición de octubre próximo no ha trascendido el número de obras del malagueño que se reunirán en su museo barcelonés, pero a tenor de la dificultad de mover y prestar obras del periodo cubista, sobre todo las de primera época, auténticas joyas de los museos donde se exponen y muy caras a la hora de asegurar, hace preveer que serán minoría del total de 80 obras que se mostrarán. El museo barcelonés solo tiene dos obras de Picasso del primer cubismo: son La ofrenda, pintada en 1908 y Cabeza, el collage de 1913 que donaron Gala y Salvador Dalí al museo en 1963.

El comisario Christopher Green, autor de libros de referencia sobre el cubismo y de alguno de sus protagonistas como Léger, Gris o Picasso, además de firmar obras de referencia del periodo como Picasso: Arquitectura y Vértigo (2005) que estará, con seguridad, en la base de su exposición, es un viejo conocido del museo barcelonés porque fue el responsable de la muestra Objetos vivos. Figura y naturaleza muerta en Picasso que pudo verse en 2008, donde reunió 70 obras creadas por Picasso entre 1907 y 1931, muchas de ellas inéditas prestadas por sus herederos y coleccionistas privados de Barcelona, además de cuatro grandes óleos procedentes del Museo Stedelijk de Amsterdam, el Metropolitan, el Guggenheim de Nueva York y la Galería Nacional de Dublín.

Las exposiciones son como las agendas de los grandes divos de la ópera que han de programarse con años de antelación. La exposición de octubre se comenzó a gestar tras la de Green de 2008 y se inaugurará ocho años después. En 2012 fue nombrado director del museo Bernardo Laniado-Romero por cuatro años, plazo que fue prorrogado un año más, hasta julio de 2016. Podría ser entonces que Laniado-Romero no sea el director que la inaugure. Berta Sureda, comisionada de Cultura del Ayuntamiento de Colau aseguró recientemente que se convocará un concurso para sustituirlo. En todo caso, la última decisión la tendrá el Patronato de la Fundación Museo Picasso, donde Sureda es solo uno de sus 14 miembros.

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Sobre la firma

José Ángel Montañés
Redactor de Cultura de EL PAÍS en Cataluña, donde hace el seguimiento de los temas de Arte y Patrimonio. Es licenciado en Prehistoria e Historia Antigua y diplomado en Restauración de Bienes Culturales y autor de libros como 'El niño secreto de los Dalí', publicado en 2020.

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