Rabell quiere derogar la reforma laboral del PP y del “señor Mas”

Catalunya Sí que es Pot recoge en su programa impulsar desde el Parlament la derogación de la reforma laboral para recuperar los derechos perdidos por los trabajadores. Lluís Rabell y Pablo Iglesias, culparon ayer al PP y al partido del “señor Mas” de la situación que sufren los trabajadores de Valeo, en Martorelles, en huelga indefinida desde julio al querer la dirección trasladar la planta a Zaragoza. CiU votó en su día a favor de la reforma.

Los dos políticos fueron recibidos con gritos de “si se puede” por parte de los empleados. “Me parece que algunos no quieren que se hable de esto en campaña”, dijo Iglesias antes de reunirse en asamblea con los trabajadores y sus familias, instalados en tiendas de campaña a las puertas de la fábrica de Valeo, de automoción y que cuenta con 250 empleados. Para Iglesias, su caso es un ejemplo claro del impacto de la reforma laboral que permite que una empresa con beneficios baje el sueldo o se permita deslocalizar la producción”, informa Efe.

En su discurso, Iglesias subrayó que sin derechos de los trabajadores, no hay soberanía. “Cuando se humilla a la dignidad de las familias, no la hay”, dijo el secretario general del partido violera que afirmó que alabó la movilización de la plantilla. “Es lo que toca hacer en estos momentos. Sin una reforma laboral del PP apoyada por el partido del señor Mas, esto no se estaría produciendo”.

Rabell insistió en uno de sus argumentos: que la reforma ha comportado que la Generalitat ya no puede intervenir en un proceso de deslocalización. “La soberanía también tiene que ver con que las administraciones más próximas puedan incidir en las condiciones de trabajo”, dijo. Tras saludar a los movimientos vecinales de solidaridad y a los ayuntamientos que apoyan a los trabajadores de Valeo, Rabell afirmó que le agradaría que “la Generalitat fuera también una institución amiga de los trabajadores que luchan por sus derechos”. El presidente del comité de empresa, Manuel Zamora, agradeció el apoyo de la candidatura y reprochó a la dirección que quiera “destruir a 250 familias para llevarlas a otra localidad cuando no hay ni argumento ni tema organizativo que lo sustente”. Zamora avisó, además, que parte de la producción de Zaragoza también se trasladará a países subdesarrollados y con menos costes. ¡Valeo no se cierra!”, clamó. La firma alega que quiere agrupar la producción para crear un centro de referencia en climatización.