“Soy mantero pero también refugiado”
Los vendedores piden diálogo al Ayuntamiento para evitar más enfrentamientos
Más de un centenar de manifestantes —entre los que se encontraban, vendedores ilegales, vecinos del barrio barcelonés del Raval y activistas de la red solidaria Tras la Manta— marcharon la tarde de ayer desde la fuente de Canaletes hasta la plaza Sant Jaume para pedir al Consistorio “diálogo” para afrontar la crisis del Top Manta, que llegó a su punto álgido el pasado jueves cuando hubo enfrentamientos entre la Guardia Urbana de Barcelona y los vendedores ilegales.
Mamme Mor, un joven senegalés que lleva meses vendiendo en el intercambiador del metro de plaza Catalunya, pidió ayer al Consistorio “diálogo y ayuda para seguir trabajando hasta que consigamos unas condiciones dignas para vivir”. Ibrahima, otro vendedor, proclamó luciendo su brazo en cabestrillo: “No somos violentos, vendemos porque es la única cosa que podemos hacer para sobrevivir”.
Los manifestantes gritaban al unísono: “Ni violentos, ni rateros, somos manteros” y trasmitieron un mensaje de no violencia y un deseo de volver a restablecer lazos con el Ayuntamiento. Sólo en un primer momento a uno de los vendedores se precipitó al asegurar utilizando un megáfono que en los enfrentamientos del pasado jueves: “Cogimos piedras para defendernos y responder a las provocaciones de los urbanos”.
La marcha recorrió La Rambla hasta la calle Ferran y desde allí, a la plaza Sant Jaume.
Durante el recorrido se pudieron escuchar proclamas, con acento afrancesado, que rezaban: “Policía racista fuera de mi vista”. “Ninguna persona es ilegal” y, sobretodo, “Soy mantero pero también soy refugiado”.
Los ánimos se fueron encendiendo al llegar a la plaza Sant Jaume, donde estaba teniendo lugar el ensayo del acto institucional de la Diada. Los manifestantes se plantaron en la puerta del Ayuntamiento justo cuando el bailarín Cesc Gelabert daba unas piruetas sobre el escenario.
Un grupo de manteros fue a reunirse con la segunda teniente de alcalde, Laia Ortiz, el resto siguió en la plaza celebrando una pequeña asamblea y tras unos minutos permitieron que siguiera el ensayo y se pusieron a admirar el número musical de la actriz Vicky Peña.
Tras la reunión, los manteros abandonaron la plaza y Ortiz aseguro que se ha restablecido el diálogo con los vendedores ilegales “después de la línea roja atravesada el pasado jueves”. La segunda teniente de alcalde no aclaró cuáles serán los pasos que se seguirán a partir de ahora ni en qué cambiará la situación de los vendedores. Tampoco sabía si se modificará el “uso del espacio público”.
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