El accidente de Germanwings eleva un 80% las muertes laborales

El número de fallecidos en Cataluña durante la jornada laboral hubiese caído el primer semestre de 2015 de no haber sido por el avión de Germanwings siniestrado el pasado 24 de marzo, que disparó las muertes por accidente laboral en un 80%. De las 45 defunciones registradas entre enero y junio por el Departamento de Empresa y Empleo, 22 corresponden a pasajeros de la aeronave que tenían su residencia y su empleo en la comunidad. En total, murieron 150 personas en la tragedia.

Si se descuentan a los fallecidos en el avión que el copiloto alemán Andreas Lubitz estrelló en los Alpes franceses, las víctimas mortales de accidentes laborales serían 23, dos menos de las que arrojó la primera mitad de 2014. A estas se suman otras siete muertes in itinere, es decir que perecieron mientras se dirigían desde su lugar de residencia a su centro de trabajo o viceversa. Estas últimas se redujeron en un 50% respecto al mismo periodo del año pasado.

Estas víctimas del Airbus A320 de Germanwings no se consideran fallecidas in itinere, ya que el desplazamiento seguía motivos laborales y transcurría dentro de sus horas de trabajo. En la contabilidad solo entran quienes están dados de alta en centros laborales con cuentas de cotización correspondientes a alguna provincia catalana. Por lo tanto, no incluye a los seis miembros de la tripulación de de la aerolínea germana ni a los empleados que desempeñaban sus labores en el extranjero y habían venido a Barcelona por negocios.

La mayoría de los 45 fallecidos durante el primer semestre en accidentes laborales pertenecía al sector servicios, en concreto, 29. Una docena se dedicaba a la industria y cuatro, a la construcción. El 84% eran hombres y el 80% trabajaba en la provincia de Barcelona. Ocho de cada 10 tenía un contrato laboral indefinido. Los accidentes con baja médica leves y graves también aumentaron durante este periodo un 4,6% y un 8,5%, respectivamente.