Caixabank cubre con voluntarios las 700 bajas previstas en su ERE

El ERE voluntario pactado por CaixaBank y los sindicatos para ajustar la plantilla del banco en 700 personas se cubrirá íntegramente, dado que las solicitudes para entrar en este expediente de regulación de empleo han superado cómodamente la cifra de afectaciones que se había pactado.

Así lo han asegurado a Efe fuentes sindicales, que han recordado que la adhesión a este ERE era voluntaria y que comportaba en la práctica prejubilaciones a partir de los 53 años e indemnizaciones para el personal de menor edad.

En cambio, las mismas fuentes han explicado que, a falta de conocer los datos oficiales del cierre del período de adhesiones, que acababa hoy, apenas ha habido solicitudes para acogerse a los 200 traslados voluntarios pactados en el ERE. Con este sistema recibían una compensación de 30.000 euros por instalarse en territorios con carencia de personal como Cataluña o las islas Baleares.

CaixaBank justificó este ajuste de plantilla para reducir el excedente de personal que tiene en las comunidades originarias de las cajas que dieron lugar a Banca Cívica, como en Andalucía, las islas Canarias o bien en Navarra.

Al ser mayor el número de solicitantes que el de afectados por el ERE, ahora se aplicará el criterio de prelación, de forma que tendrán prioridad para entrar aquellas personas que trabajen en oficinas situadas en las zonas con excedente de personal: la provincia de Sevilla o la Comunidad de Madrid, entre otros.

CaixaBank dividió a los 700 afectados por las extinciones de contrato en tres colectivos: los nacidos en 1960 o antes (los que tengan más de 55 años a finales de este año); los nacidos en 1961 y 1962 (54 o 53 años) y los nacidos a partir de 1963 (52 años o menos).

Para estos últimos, el banco fijó una indemnización en 45 días por año trabajado, con un mínimo de 36 mensualidades y un máximo de 42. Respecto a los empleados de 53 y 54 años, el banco ofreció pagarles el convenio especial de la Seguridad Social hasta los 63 años, y abonarles el 57 % de su salario fijo bruto anual correspondiente a ocho anualidades.

En cuanto a los mayores de 55 años, la entidad que preside Isidre Fainé se comprometió a abonarles el 57 % de su salario fijo bruto anual hasta los 63 años, así como a realizar las correspondientes aportaciones al plan de pensiones hasta esa edad y a mantener a los afectados la cobertura sanitaria.

A todo este personal de 53 o más años que accede a una prejubilación se pactó abonarle también una prima que oscilaba entre los 15.000 y los 35.000 euros, según su edad.