El tranvía de la Diagonal resurge en campaña
Los partidos se lanzan reproches sobre el actual modelo urbanístico
El urbanismo, de lo global a lo concreto, fue uno de los protagonistas de la campaña electoral de ayer en Barcelona. Y si algo quedó claro es que tiene mucho de política. Por la mañana, dos de los alcaldables, Xavier Trias (CiU) y Ada Colau (BComú), expusieron sus propuestas para la avenida Diagonal. Al socialista Jaume Collboni le faltó tiempo para sumarse al debate, con vídeo incluido reprochando al convergente cómo ha cambiado de opinión respecto a cuando estaba en la oposición. Por la tarde, los expertos en urbanismo de cada candidatura debatieron sobre la cuestión en el Colegio de Arquitectos (COAC).
En ambas dimensiones se visualizaron las distancias entre las propuestas de los partidos. Comenzando por la Diagonal. Trias presentó su proyecto de movilidad para implantar autobuses eléctricos y sobre la unión de los tranvías del Besòs y el Llobregat, dio por enterrado el trazado para unirlos por la Diagonal: perjudicaría la movilidad mucho más de lo que la resolvería, aseguró y argumentó que cuando hace años se abrió el debate los vehículos eléctricos no se tenían en cuenta como ahora. Trias, con todo, no cerró la puerta a estudiar un trazado alternativo. Mientras, Colau apostó por cerrar la gran avenida al tráfico y rescatar el trazado del tranvía en línea recta entre Glòries y Francesc Macià.
El socialista Jaume Collboni se sumó al debate pidiendo “que se dejen de ocurrencias” y sacó del cajón un vídeo de 2009 de un Trias entonces concejal en la oposición defendiendo, ante el entonces alcalde del PSC Jordi Hereu, el trazado del tranvía por la Diagonal en un plenario. ERC y PP ya han dicho en los últimos días que optan por estudiar trazados alternativos apoyándose en expertos.
Por la tarde, en el COAC los siete partidos que optan a la alcaldía coincidieron en la importancia que tiene el urbanismo para mejorar la vida de la gente o democratizar la ciudad. El actual concejal de Hábitat Urbano, Antoni Vives (CiU), se cruzó reproches sobre la responsabilidad en la actual configuración de Barcelona con los representantes de PSC (Daniel Mòdol) o BComú, que integra a ICV (Janet Sanz), cuyos partidos gobernaron durante 32 años. Hubo discrepancias entre cuestiones tan esenciales como cuántos pisos vacíos hay en Barcelona. Vives los cifró en 8.000 y la número dos de la CUP, Maria Rovira, en 90.000. El primero apostó por construir alquiler social y rehabilitar, en sintonía con los representantes del PP, PSC o ERC; la segunda por rescatar los pisos vacíos antes de construir nuevos, al igual que BComú.
Hubo aportaciones interesantes y que salieron del discurso habitual. Como “el impacto que las licencias de actividad tienen sobre la ciudad" (Buhigas); la falta de la perspectiva de género en la construccion de la ciudad (Rovira); la preocupación por la poca participación entre los mismos afectados por los planes (Bolaños) o la capacidad del urbanismo cono herramienta “correctiva a la corta y preventiva a la larga” (Sanz).
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.