Un inmigrante declara al juez que fue maltratado en las duchas del CIE

El inmigrante argelino Mohamed Rezine Zohuir declaró ayer ante el juez que fue golpeado en las duchas del Centro de Internamiento para Extranjeros (CIE) de Valencia por dos agentes de Policía, los cuales le habrían causado una herida en la cabeza y otras contusiones. El titular del juzgado de Instrucción número 20 de la ciudad abrió el nueve de febrero un procedimiento después de que Zohuir denunciara supuestos maltratos en el CIE, donde son retenidas personas en situación irregular en España. El centro niega los hechos.

Andrés García Berrio, abogado de la plataforma CIE No, que pretende la clausura del centro y asiste al inmigrante, aseguró que la Fiscalía había defendido la continuación de la investigación. La Abogacía del Estado, en cambio, solicitó el archivo.

Según relató García Berrio, el abogado del Estado defendió la versión del CIE, en la cual el inmigrante fue llevado a la ducha por un agente para “tranquilizarlo” y allí se “autolesionó” al caer al suelo. El letrado destacó que las duchas son uno de los pocos lugares del recinto donde no hay cámaras de seguridad. El juez ha requerido al centro las grabaciones de ese día, la identificación del agente denunciado y de otros testigos, como la enfermera que atendió inicialmente a Zohuir.

El inmigrante declaró al juez que después de una discusión con un interno en el comedor del CIE fue conducido a las duchas, donde dos agentes le habrían golpeado mientras le llamaban “hijo de puta” y “moro”. Esquerra Unida, Compromís y los socialistas pidieron el jueves en las Cortes el cierre del centro, una moción que fue rechazada por la mayoría del PP.