Convergència pide a Unió que se sume al objetivo de la independencia

Convergència ha saludado este jueves el acuerdo alcanzado entre Artur Mas y Oriol Junqueras para celebrar las elecciones el 27 de septiembre y ha considerado esos comicios como el instrumento para ganar un mandato democrático para votar sobre la independencia. "Esto va de verdad", ha proclamado Josep Rull, coordinador de los convergentes, que ha recordado que muchos no creían posible el pacto sobre la fecha y la pregunta del 9N, que se sacaran las urnas y que se cerrara un acuerdo sobre las elecciones. "Había gente que se alegraba del final del proceso soberanista y al final no ha habido fractura", ha dicho. Los nacionalistas aún no han aclarado si se presentarán a esas elecciones con sus propias siglas posiblemente porque aún aguardan la decisión de Unió, que siempre ha rechazado la secesión. Los democristianos afrontarán el debate definitivo tras las elecciones municipales.

"Respetamos los tiempos de Unió pero deseamos que se sumen al objetivo de la independencia y que se consolide así el espacio histórico que han formado los dos partidos en Cataluña", ha señalado Rull. El consejero de Interior Ramon Espadaler, número dos de Unió, ha situado la decisión de su partido después de mayo y ha preferido resaltar que el pacto entre Mas y Junqueras ofrece "estabilidad" y acaba con una "incertidumbre" que "no era positiva". En la semana previa al 9N, los democristianos animaron a sus simpatizantes a votar sí en favor del Estado propio y dieron libertad de voto sobre si lo querían o no independiente. La propia vicepresidenta del Gobierno declaró que había votado sí.

Junqueras ha empezado a marcar los plazos. El republicano ha dicho que si hay una mayoría suficiente tras las elecciones catalanas del próximo 27-S debe abrirse un proceso constituyente que declare la independencia de Cataluña y que ésta "se ejerza en 2016". "Simultáneamente", ha agregado Junqueras, "más allá de las simples declaraciones, lo que se trata es de llenarlas de contenido" mediante la "puesta en funcionamiento efectivo de las estructuras de Estado y la elaboración de una Constitución que debe ligarlo todo, y que  debe ser ratificada por el Parlament y por los ciudadanos de Cataluña".

Esto va en serio. Buscamos un mandato democrático en favor de la independencia", dice Rull, número dos de CDC

Convergència ha sostenido que tiene muy avanzado el acuerdo sobre la parte del programa electoral sobre la independencia que compartirán con ERC y se proponen difundir cómo desean que sea ese futuro Estado. "Hemos estado mucho tiempo discutiendo sobre si podíamos o no votar y ahora hay que explicar bien cómo sería ese nuevo país", ha señalado Rull.  Los convergentes se han fijado cuatro objetivos en lo que resta de mandato: consolidar las estructuras de Estado y aprobar los presupuestos; ampliar la mayoría soberanista favorable a la secesión; lanzar una campaña internacional para que se entienda qué se vota el 27-S y continuar la acción de Gobierno.

La oposición ha encajado con estupefacción el acuerdo. El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha advertido esta mañana que las instituciones europeas no reconocerán el resultado del 27-S si se convierten en un sustituto de un referéndum sobre la independencia. Para el líder socialista, los comicios con carácter plebiscitario resultarán aún menos creíbles si CiU y Esquerra no se presentan en una lista conjunta y si, además, los nacionalistas intentan condicionar la composición de las listas de los republicanos. Por todo ello, Iceta ha calificado de "nuevo fracaso" el pacto. El dirigente socialista ha recordado que el presidente catalán se fijó como objetivo hacer una lista conjunta para celebrar elecciones plebiscitarias y prometió que si no lo lograba acabaría la legislatura. Al final no sucederá ninguna de las dos cosas, ha recordado Iceta, quien ha constatado que Mas ya fracasó también con el pacto fiscal y con el adelanto electoral de 2012, informa Pere Rios.

Europa  no reconocerá el resultado del 27-S si se convierte en un  referéndum", avisa Miquel Iceta, del PSC

Alicia Sánchez-Camacho ha augurado que el tiempo que resta de legislatura  van a ser "nueve meses de fraude" que se van a convertir en la campaña electoral más larga de la historia utilizando medios públicos y ha avisado que ni el Gobierno de Rajoy ni el PP van a permitir que se destine "ni un euro" en proyectar las estructuras de Estado. La popular ha tachado de "error" la convocatoria electoral y ha vaticinado que Mas va a lanzar una operación de propaganda secesionista en la que va a seguir tergiversando la historia y engañando a los catalanes. La senadora ha advertido además de la falta de consistencia del acuerdo  y ha apuntado que es solo una "unidad forzada, artificial y ficticia" de cara a la galería y a contentar a los independentistas. "Las heridas entre los dos dirigentes son muy grandes", ha subrayado. "Mas ha sido un presidente pésimo, el peor de la historia de Cataluña. Todo el acuerdo busca su supervivencia política y en tapar las vergüenzas del caso Pujol", ha afirmado vaticinando que Esquerra votará este viernes en contra en la comisión sobre la corrupción de la comparecencia de Mas.

No permitiremos que se gaste ni un euro en estructuras de Estado. Haremos cumplir la ley", afirma Camacho

Mientras, el ecosocialista Joan Herrera ha coincidido con la popular en que Mas utilizará la presidencia de la Generalitat para hacer campaña electoral.  "Es un oportunista. Mas pasa a ser un candidato, seguramente el que más meses tendrá de campaña, porque ocupará la Presidencia haciendo de ella una plataforma electoral", ha apuntado tras asegurar que el 27-S es una oportunidad  para cambiar el Gobierno actual. Acompañado de la colíder de ICV, Dolors Camats, y el portavoz de Esquerra Unida Alternativa (EUIA), Joan Mena, Herrera ha aclarado que no colaborará "bajo ningún concepto" con la hoja de ruta de la que ayer hablaban Mas y Junqueras porque la consideran "una extensión del pacto de gobierno CiU-ERC", informa Clara Gil.