Los trasplantes crecen un 7% y superan el récord de 2012

El número de trasplantes de órganos realizados en los hospitales andaluces el año pasado vuelve a cifras históricas. Tras el descenso del 6,6% experimentado en 2013, Andalucía registró el año pasado 736 intervenciones, 50 más que en el periodo anterior, lo que supone un incremento del 7%. Estos datos superan levemente la cifra récord alcanzada en 2012 (734). Así se refleja en el balance presentado este lunes por la Consejería de Salud, que cifra en 315 las donaciones de personas fallecidas (18 más que en 2013) y en 64 los donantes vivos. El aumento del número de donaciones ha venido acompañado, además, de un descenso en las listas de espera.

De los 736 trasplantes de órganos registrados, 453 fueron de riñón, 205 de hígado (seis infantiles), 34 de corazón (uno infantil), 26 de pulmón y 18 de páncreas. A estas intervenciones, según el departamento de María José Sánchez Rubio, hay que sumar los implantes de distintos tejidos (córneas, válvulas cardíacas, tejido óseo, segmentos vasculares, entre otros) que recibieron más de 2.300 pacientes.

Con estas cifras, la tasa de donación de la comunidad se situó en 37,5 donantes por millón de habitantes, la más alta conseguida hasta ahora y el doble de la tasa media anual alcanzada por los países de la Unión Europea (19 donantes por millón de habitantes). Asimismo, es ligeramente superior a la media española de 2013 (35,1 donantes por millón de habitantes).

El coordinador autonómico de trasplantes, Manuel Alonso, ha explicado que las donaciones registradas han supuesto un descenso progresivo del número de pacientes que esperan un trasplante. Ha señalado que se reduce “por cuarto año consecutivo” y que el tiempo de espera es de entre uno y dos años. En cifras, la lista ha pasado de los 905 pacientes de 2010 a los 693 del pasado año, lo que supone una caída del 23% en cuatro años. “Hay que valorar la solidaridad que han mostrado las familias de los donantes fallecidos, que ha permitido alcanzar cifras históricas”, ha afirmado la consejera.

En cuanto al perfil del donante fallecido, la edad media se situó en 60 años. Los donantes menores de 45 años han pasado de ser el 66% en 1993 a solo el 16%. Por su parte, los de 60 o más años han subido del 6% en ese año al 53% en 2014.