Desigual vuelve a desafiar a Puig y abre tres tiendas en domingo

La firma de moda Desigual desafió ayer al Gobierno de la Generalitat y abrió tres de sus tiendas del centro de Barcelona. Lo hizo a pesar de que el de ayer no era un domingo previsto por la ley de Horarios Comerciales ni contemplado entre los acordados por el Ayuntamiento de Barcelona y las asociaciones de comerciantes para que las tiendas pudieran hacer negocio. Y aun así, junto a Desigual, a media tarde en Ciutat Vella había multitud de comercios a pleno rendimiento. La empresa no hizo comentarios al respecto.

Alrededor de las seis de la tarde, Desigual —la segunda empresa de moda catalana con mayor facturación después de Mango— tenía abierta la persiana en sus tiendas de la Rambla, el Portal de l’Àngel y la calle de Ferran. En cambio, mantuvo cerrada su gran establecimiento insignia de la plaza de Catalunya. Esas aperturas se produjeron a pesar de que el consejero de Empresa y Empleo, Felip Puig, le había levantado acta por haber abierto el pasado 14 de diciembre, otra fecha que no estaba en el calendario de festivos en los que los comercios pueden trabajar.

En plena batalla judicial por la ley catalana de Horarios Comerciales, que está suspendida tras un recurso del Gobierno central al Constitucional, Puig recordó que esa apertura no estaba amparada por ningún marco legal, tampoco por la normativa básica.

La ley estatal permite abrir a tiendas de menos de 300 metros cuadrados que no pertenezcan a ninguna gran empresa. La catalana, en cambio, es más restrictiva y solo permite que operen en domingo los establecimientos comerciales de venta personalizada o en régimen de autoservicio, siempre que la superficie de exposición y venta no supere los 150 metros cuadrados.

La mayoría de las grandes firmas ayer acataron la norma y permanecieron cerradas. Sin embargo, en el Portal de l’Àngel, la calle de Portaferrissa y la Rambla sí había varios comercios que decidieron hacer caso omiso a la legislación. Por ejemplo, levantaron la persiana la tienda de Custo Barcelona en la Rambla o bien la de Foot Locker en el Portal de l’Àngel, donde también trabajan varias zapaterías aprovechando la gran afluencia de gente que había ayer en la capital catalana. En otras calles de menor tránsito ayer también abrieron con normalidad varias tiendas de moda y complementos.