Podemos construye sus mimbres políticos en los principales municipios

Euskadi no es una isla ajena a los movimientos de la política central. Podemos será un actor clave también en las elecciones vascas. Así lo constataba el viernes el sondeo electoral del Euskobarómetro, que coloca al partido de Pablo Iglesias a un escaño de arrebatar el poder al PNV. Pero las elecciones a lehendakari quedan todavía lejos. A dos años vista, Podemos está inmersa en un largo recorrido que comienza este fin de semana a nivel municipal. 33 localidades vascas pueden votar desde el pasado viernes hasta el 30 de diciembre por sus favoritos para liderar los círculos locales.

En las listas hay más de 300 candidatos dispuestos a ostentar algún tipo de poder en los consejos ciudadanos y secretarías generales. Ninguno tiene la visibilidad de Iglesias o Juan Carlos Monedero, a cuyos nombres y marca evocan los encuestados cuando les pregunta por un hipotético voto. Así lo reconoce Cristina Macazaga, portavoz de Podemos Álava y parte de una de las seis candidaturas que se presenta a liderar Vitoria. “No hay noción de que exista Podemos Álava. Hay que ir despacio y con cautela, sin dejarnos llevar por encuestas”.

En Álava, con candidaturas también en Amurrio y Alegría-Dulantzi, ninguno de los grupos ha recibido el beneplácito del estatal Claro que Podemos, liderado por Iglesias. Un factor que ha servido de revulsivo para diversas candidaturas a lo largo de España, como la de San Sebastián, donde el grupo de Hannot Sansinenea ha recibido el apoyo de los líderes centrales. El pasado lunes recibieron incluso la visita en un mitín de Monedero. Algo que no sentó demasiado bien a En Donostia también Podemos, que escribió una carta de rechazo firmada por algunos de los nombres de candidaturas vascas y navarras.

“Aunque esté establecido así, hay una desproporción de fuerzas en unas votaciones que deberían estar centradas en los círculos y alimentarse de la cercanía”, argumenta Juantxo Iturria, candidato del ala crítica que reconoce que las grandes diferencias están en la estructura. Tanto ellos como los bilbaínos Podemos somos todos —que se denomina más humilde y cercano a los círculos— optan porque el secretario general tenga menos protagonismo y presencia, en una construcción vertical y los círculos en primer plano. “Se ha tensado la relación y el parón asambleario ha sacado heridas, pero dado que son listas abiertas y no completas, acabaremos trabajando juntos como hemos hecho hasta ahora”.

Los candidatos son conscientes de que el nombre Podemos no se podrá presentar a las municipales de marzo. Abogan, en su mayoría, por fórmulas de participación ciudadana como las agrupaciones ciudadanas independientes para las que necesitarán 15.000 firmas. En algunos municipios, Irabazi-Ganemos, abiertamente dispuesta a dialogar con Podemos, está tratando de ganarles delantera, pero en Bilbao lo tienen claro: “No iremos con sopas de letras con partidos a la sombra”, anticipaba Lander Martínez, secretario general de Pensando Bilbao, que cuenta con algún militante que participaba en la asamblea de Bilbao. En esta ciudad, solo el grupo Claro que Podemos, que se denomina oficialista, se opone frontalmente a presentarse a los comicios municipales de mayo de 2015.

En las ideas todas las candidaturas comparten un discurso básico: transparencia y una participación mucho más presente. En Álava, por ejemplo podrían apoyar un referéndum en el burgalés Condado de Treviño, para adherirse a Álava. El resto de la política se decidieran en asamblea. Una indefinición de la que se ha valido el ala nacionalista para criticarlos.

Pero el poder está en la calle. Bilbao cuenta con casi 1.500 inscritos. En Bizkaia hasta 22 municipios con más de 100 inscritos pueden elegir a su candidato, entre los que destacan Barakaldo o Getxo. Todos pueden votar en la página web de Podemos, que no estuvo habilitada hasta el viernes a las 18.00. Algunos candidatos no aparecían. Las fotos de muchos se habían traspapelado. “Son problemas por tener que hacerlo todo tan rápido y al ser tanta gente”, reconocía uno de los candidatos que no daba con la pestaña para votar.

Y el proceso todavía es largo. Siguen apareciendo círculos. El dos de enero se nombrarán los secretarios generales. Lo próximo, antes de las elecciones, será elegir líder autonómico. “Quizás se solapen las primarias con la creación del programa”, anticipa Yolanda Martínez, de Podemos somos todos. Allí decidirán, además, si presentarse a las elecciones forales, en lo que todos los frentes parecen estar de acuerdo. Hay cierto ímpetu por lograr representación. “No estar en las instituciones limita”, explica Macazaga.