Barcelona reconoce que no hace bastante para afrontar los desahucios

El Ayuntamiento de Barcelona ha reconocido hoy que no hace bastante para afrontar el drama de los desahucios. Ha sido por boca del teniente de alcalde de Hábitat Urbano, Antoni Vives: "¿Es suficiente lo que se hace? No". Vives, que ha insistido en que cuando CiU llegó al Gobierno municipal tuvo que "empezar de cero, porque se reaccionó tarde y mal y no había nada" para afrontar el problema, ha llevado el peso del pleno extraordinario sobre los desahucios.

Vives subraya que CiU  "tuvo que empezar de cero, porque se reaccionó tarde y no había nada"

Una sesión que se ha celebrado, a instancias de ICV, más de cinco años después de que la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) alertara del drama que se avecinaba. El pleno ha durado apenas una hora y media y se ha convertido en cruce de acusaciones, sin ninguna conclusión, entre el Gobierno municipal y el resto de los grupos del plenario, ante una tribuna de invitados llena de activistas de la PAH y de representantes del movimiento vecinal. La PAH ha recordado que en Barcelona se han producido 41.000 desahucios vinculados a hipotecas desde 2007; y que en 2013 hubo 30 al día, tres cuartas partes en pisos de alquier.

En síntesis, Vives se ha esforzado en enumerar todo lo que el Ayuntamiento de Barcelona hace para lidiar con la problemática de la vivienda, en un informe en el que también reconoce que los recortes de la Renta Mínima de Inserción (RMI) tienen parte de responsabilidad en la pérdida de vivienda de muchas familias y que el parque de alquileres sociales es insuficiente. Grupo tras grupo, le han reprochado que no conoce la ciudad de la que habla ni sus barrios (PSC); que anuncia las mismas medidas varias veces y que tiene pisos vacíos (PP); que no aplica soluciones contundentes y rápidas (ICV) o que no tiene capacidad para dar respuesta al problema (UxB).

Gomà reprocha a Vives que CiU apoyara el  desahucio exprés

El debate ha ido subiendo de tono, sobre todo en los diálogos entre Vives y el presidente del grupo de ICV, Ricard Gomà, que ha empezado su intervención recordando que en la mañana de hoy estaba previsto un desahucio en Ciutat Meridiana. Las intervenciones se han calentado hasta el punto de que el responsable de vivienda ha dado un manotazo sobre la mesa y le ha espetado que "los funcionarios municipales han atendido 40.000 casos y no van a trabajar con camisetas de colores". "Usded señor Gomà ha sido su jefe [en los mandatos del tripartito] y recortó un 30% y nosotros lo hemos aumentado", le ha reprochado antes de dejar claro que la intención de Gomà es "dirigirse a un público muy concreto porque quiere gobernar".

Antes, Gomà le había echado en cara al teniente de alcalde que su partido, CiU, contribuyó a aprobar con su voto el desahucio exprés en el Congreso de los Diputados, que ha recortado la renta mínima y ha bajado a un tercio las ayudas al pago del alquiler: "Ni conocen el problema, ni luchan por prevenir ni hacen suficiente cuando ocurre", ha dicho Gomà. En otro turno, le ha reprochado a Vives "que va a Miami y a Davos pero no ha puesto los pies en una oficina de los servicios sociales". "La descalificación es la muestra de su incompetencia, no va de cifras, va de sufrimiento", ha concluido.

Fernández-Díaz echa en cara al Gobierno que tenga pisos vacíos

Desde el PSC, Carmen Andrés, ha recordado que Vives dijo que Torre Baró "sería el Pedralbes de Barcelona" y es uno de los barrios más pobres y con más desahucios de la ciudad. El líder de los populares, Alberto Fernández-Díaz, le ha echado en cara que el Ayuntamiento o el consejo comarcal tengan pisos vacíos: "¿Se automultarán como harán con los bancos?", ha preguntado, o que haya vendido la gestión de alquileres públicos a un fondo buitre. Y ha llamado a reflexionar sobre el incidente en los servicios sociales de Ciutat Meridiana: "No podemos hacer recaer la responsabilidad sobre los trabajadores municipales que no son responsables de la situación de adversidad de los vecinos". Desde UxB, Joan Laporta ha sido el menos beligerante, pero ha recordado que su grupo ya impulsó en 2011 una proposición "que declaraba que en Barcelona nadie perdería el hogar".