El Gobierno pide al PP que “pare ya” la polémica sobre la RGI

El consejero de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Juan María Aburto, ha exigido hoy al PP que "pare ya" la polémica sobre la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) en una sesión del Parlamento que ha vuelto a vivir un acalorado debate sobre esta cuestión. Después de que en el pleno de ayer PNV, EH Bildu y PSE-EE plantaran al parlamentario del PP y alcalde de Vitoria, Javier Maroto, durante el debate de una propuesta sobre el fraude en la RGI defendida por éste, la Cámara ha vivido hoy la resaca de esa sesión con una pregunta de Txaro Sarasúa (PSE-EE) al consejero. La polémica ha comenzado con la intervención de la parlamentaria socialista, que ha sido advertida en varias ocasiones por la presidenta del Parlamento, Bakartxo Tejeria (PNV), de que se centrara en la pregunta al consejero y no en criticar a Maroto.

Sarasúa ha dicho que mientras otros grupos quieren conocer la evolución de la RGI, a otro parlamentario, en referencia al alcalde de Vitoria, "solo le interesa saber dónde han nacido" los perceptores. Ha añadido que a Maroto no le interesan los datos de cuántos inmigrantes cotizan a la Seguridad Social o las personas que viven en pobreza encubierta, porque con su posición lo que hace es "acusar a todo un colectivo". Ha recordado que la Ley de Garantía de Ingresos reconoce el derecho de todas las personas que cumplen los requisitos a percibir la RGI, independientemente de su procedencia, y ha preguntado al consejero si comparte que Maroto ha "tergiversado" los datos que recientemente envió al Parlamento sobre estos perceptores.

Desde la bancada del PP han sido constantes las protestas por esta intervención, incluso Borja Sémper se ha puesto en pie para reclamar a la presidenta del Parlamento que no permitiese a la diputada socialista que siguiera con esa intervención. De hecho, al acabar el punto y tomar la palabra la parlamentaria popular Laura Garrido, visiblemente enfadada, ha expresado su protesta por la "utilización torticera del reglamento", quizás por el "ridículo" que, a su juicio, hicieron ayer PNV, EH Bildu y el PSE-EE con su plante al PP. La presidenta de la Cámara ha pedido a la parlamentaria que se centrase en su pregunta y que "no siguiera por ahí". Con el ambiente ya subido de tono, el consejero de Empleo y Políticas Sociales ha accedido a la tribuna de oradores y ha respondido a la parlamentaria socialista que comparte con ella sus reflexiones, y ha reclamado al PP que "paren ya" con la polémica, que dejen de "escupir al cielo" y que "no jueguen con fuego porque quizás se van a quemar". "¿Cuánto valen un puñado de votos?, Se los cedo, de verdad, no merecen la pena, porque la política sin ética no es otra cosa que tiranía", ha recalcado.

Los españoles renuncian más que los extranjeros a contratos"

Aburto ha recordado que en su pregunta parlamentaria sobre los perceptores de la RGI Maroto quiso diferenciar no a los españoles de los extranjeros, sino a los nacidos en España y fuera. "Se ha obviado a los nacionalizados y ¿Qué pasa?. ¿Que hay gente a la que los nacionalizados españoles solo les sirve para que jueguen en su selección de fútbol, representen a su país en las olimpiadas o incluso para que les voten?", se ha preguntado. El consejero también ha cuestionado por qué en su pregunta Maroto eliminaba de los datos a los pensionistas, si es porque "siente vergüenza, ya que si no fuera gracias a la RGI miles de viudas estarían condenadas a la pobreza por un sistema de pensiones que las menosprecia". Aburto ha seguido con sus interrogantes y ha preguntado "por qué no se dice que los españoles renuncian más que los extranjeros a contratos" de trabajo o cuánto aportan a la Seguridad Social los extranjeros.

Ha lamentado que en esta cuestión "se juegue con lo emocional" y ha apuntado que por eso él también quería aportar situaciones en este ámbito: ¿Qué le decimos a una niña de siete años que va a la escuela y que si le quitamos la RGI a su familia quizás no pueda desayunar? o a quienes la reforma laboral les ha dejado en una situación de precariedad o a un joven que nunca ha contribuido y fallecen sus padres y se queda sin recursos". El consejero ha explicado que está a favor de mejorar el sistema y depurar el fraude que pudiera haber, y que por ello, por ejemplo, propuso crear una unidad municipal para revisar el padrón y el Ayuntamiento de Vitoria no ha querido firmar el protocolo con Lanbide de colaboración con los servicios sociales. "Se quiere confundir a la sociedad y, seguramente, se la quiere manipular, pero con una técnica irresponsable y con falta absoluta de ética", ha concluido.