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Barbate vuelve a retrasar los pagos de las nóminas de sus empleados

El alcalde atribuye el retraso a la asfixia por la deuda con las Administraciones

Vista aérea de Barbate.
Vista aérea de Barbate.garcía cordero

La asfixia económica del Ayuntamiento de Barbate (Cádiz) vuelve a aflorar. Los casi 300 empleados municipales no han percibido parte de la nómina de agosto ni ninguna posterior. El alcalde, el socialista Rafael Quirós, lo atribuye a la precariedad de las arcas locales, ahogadas por la deuda con las administraciones pero confía en encontrar una rápida solución. UGT alertó ayer de que se pueden repetir los graves problemas sufridos en 2012 cuando algunos trabajadores llegaron a estar cuatro meses sin cobrar.

Según los datos municipales, los empleados de Barbate han cobrado todos sus sueldos íntegros, salvo parte del de agosto, la totalidad de septiembre y tampoco se ha pagado el de octubre, aunque el alcalde defiende que lo habitual es cobrar al mes siguiente. “Estamos en negociaciones con Diputación para recibir un adelanto”, aseguró el alcalde, Rafael Quirós, acostumbrado a que conseguir dinero para las nóminas sea la tarea que le lleva la mayor parte del día.

El secretario provincial de UGT en Cádiz, Francisco Andreu, que se reunió con los representantes municipales del sindicato, alertó de que se pueden repetir los dramáticos momentos vividos hace dos años. “El Ayuntamiento debe velar por los intereses y derechos de estas familias y, en su gestión, debe prevalecer el pago de los salarios de sus trabajadores”, aseguró.

En 2012 los empleados del Ayuntamiento barbateño organizaron una huelga indefinida y una manifestación para reclamar el dinero que les debían, en un entorno, de graves dificultades económicas en el pueblo, por la crisis del sector pesquero. UGT teme que se repitan los mismos acontecimientos en las vísperas de la Navidad.

La dificultad económica para pagar nóminas la ha ratificado la propia Cámara de Cuentas de Andalucía que, en su último informe de fiscalización, alertó de la grave “asfixia económica” que padecía su Ayuntamiento en el período analizado entre 2008 y 2012. La falta de ingresos y la imposibilidad de acceder a fondos de otras administraciones por la retención del dinero debido a su deuda de 73 millones de euros. “La nula capacidad de maniobra en los próximos ejercicios y la permanencia de las tensiones en tesorería impedirán el normal cumplimiento de sus obligaciones”, vaticinaba ya este informe.

Las nóminas de Barbate cuestan al mes 500.000 euros (un millón cuando hay extra). Desde que gobierna el PSOE, el Ayuntamiento ha pasado de 410 empleados a menos de 300. No ha habido despidos pero no se ha cubierto ni una sola baja.

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