Diputados a tiempo parcial
No se puede ser parlamentario autonómico y dedicar la mitad de la semana a una alcaldía
El Tribunal Constitucional lo ha dejado claro: si queremos mejorar el funcionamiento de las instituciones, y por tanto la calidad de nuestra democracia, los diputados deben serlo a tiempo completo. No a tiempo parcial.
La consecuencia de la reciente sentencia del Constitucional avalando la ley electoral de Andalucía, en la que se declaraban incompatibles los cargos de alcalde, presidente de Diputación o de Mancomunidad y diputado autonómico, va mucho más allá de un severo contratiempo para el PP: los tres principales líderes del partido no son diputados (tras optar la secretaria general por seguir de alcaldesa de Valverde del Camino).
Desde los tiempos de Javier Arenas, los alcaldes eran la punta de lanza de su estrategia frente a la Junta. Cada dos por tres, los reunía en algún punto de la geografía andaluza y se hacían una foto de familia. “Estos son mis poderes”, chuleaba Arenas. Alcaldes que presentaba a las elecciones autonómicas para aprovechar su indudable tirón electoral. En la anterior legislatura, había 17 alcaldes entre los 47 diputados del PP. Ahora hay siete, entre ellos los de Sevilla, Córdoba y Huelva, que ya han anunciado que renuncian a su escaño en cumplimiento de la sentencia del Constitucional.
El actual presidente del PP, Juan Manuel Moreno, ha seguido la estela de Arenas. También es muy dado a reunirse con sus alcaldes. Alguna de esas reuniones rozó el esperpento. Como la de Antequera, cuando dejó una silla vacía reservada a la presidenta de la Junta.
El PP, que gobierna en las ocho capitales andaluzas y cinco diputaciones, quería seguir sacando rédito a sus alcaldes en los comicios autonómicos. Pero el Constitucional ha dicho basta. En su sentencia, señala que el objetivo de la ley electoral es la mejora del funcionamiento de las instituciones, para que sean “más transparentes y cercanas a la ciudadanía, combatiendo el desapego creciente que muestra la ciudadanía hacia la actividad política y hacia aquellos que la ejercen”.
Esa sentencia ha coincidido con una iniciativa parlamentaria socialista. El secretario general, Pedro Sánchez, quiere que los diputados del Congreso tengan dedicación exclusiva. Se podrá quizá ejercer la docencia, pero no trabajar en un bufete o en una empresa. Actualmente hay 17 diputados empresarios del PP.
Las dos noticias van en la misma dirección. No se puede ser alcalde y diputado. No se puede ser diputado en ratos libres y dedicarte a tus negocios la mitad de la semana. Si, como señala el Constitucional, queremos combatir el desapego de la ciudadanía hacia la política y los políticos, los diputados deben ser los primeros en dar ejemplo: dedicando todo su tiempo y energía a representar a quienes le votaron. No a hacer negocios privados y ser diputados a tiempo parcial.
