Erkoreka detecta “más flexibilidad y disposición” en la izquierda ‘abertzale’

A falta de la cita con la presidenta del PP, Arantza Quiroga, que se producirá este miércoles, y con el portavoz de UPyD, Gorka Maneiro —el día 15—, el lehendakari Iñigo Urkullu tiene el camino relativamente despejado para su demandada estabilidad institucional. La secretaria general del PSE, Idoia Mendia, puede sostenerle los presupuestos para 2015, si estos cumplen con las exigencias de gastos sociales y de mantenimiento de la estructura del estado del bienestar, además de plantillas e inversiones dedicadas a la creación del empleo, y Hasier Arraiz demostró este lunes, a entender del portavoz del Gobierno, Josu Erkoreka una mayor “flexibilidad y actitud” para llegar a acuerdos.

En respuesta a esa actitud, Urkullu se comprometió con “reformular” el suelo ético para que puedan sentirse cómodas todas las familias políticas vascas. Tanto el PSE como el PP fueron este martes taxativos a la hora de poner en valor la disposición del lehendakari a buscar un acuerdo más amplio en torno a ese asunto: “Es un acuerdo que no admite merma”, vinieron a decir.

Aprobado por el PNV, el PSE y el PP en marzo del pasado año, el suelo ético defiende los derechos humanos y los valores democráticos, el “reconocimiento de la injusticia de la violencia”, del daño causado y de la dignidad de las víctimas, además del respeto a los derechos humanos. De forma paralela exige el fin definitivo de ETA para la consolidación de la nueva situación basada en una memoria que no sea neutral, sin “verdades a medias”. Erkoreka avanzó este martes que no existe todavía aún un texto base para empezar a hablar y precisó que el único elemento conocido para calibrar la voluntad de la izquierda abertzale son las declaraciones de Arraiz en el pleno de política general en las que aseguró que están dispuestos a “reflexionar y plantear una nueva perspectiva en torno al suelo ético para que pueda ser compartido”.

Quiroga, sin embargo, le va pedir hoy a Urkullu, que defina de forma clara su recorrido político y económico y su posición entre el modelo “fracasado” del diputado de Gipuzkoa, Martin Garitano, o el del desarrollo de regiones como “la alemana Baviera”, que a entender de la secretaria general del PP, Nerea Llanos, impulsa el PP.

Erkoreka cree que lo sustancial es conseguir de los partidos de la oposición un compromiso por la estabilidad. “La estabilidad presupuestaria ayudaría a consolidar la recuperación económica y la creación de empleo”, dijo en la Casa de Juntas de Gernika.

Asimismo anunció que la intención del lehendakari es mantener el calendario de los trabajos de la Ponencia de Autogobierno del Parlamento vasco puesta en marcha antes del verano para evaluar el funcionamiento del Estatuto y consensuar un “nuevo estatus político” para Euskadi. Este calendario pospone el debate sobre proyectos hasta la segundad mitad de 2015.

En cualquier caso, Erkoreka dijo que no considera a ningún partido como preferente a la hora de buscar acuerdos. En su opinión lo que sí están claros son los ejes de actuación y, en el caso de los presupuestos “dos de cada tres euros que se incorporen a las cuentas públicas están destinadas a políticas sociales o a la consolidación del empleo público estructural”, aseguró.