González (Cierval): “Valencia esgrime la equidad y no la independencia”

El presidente de la patronal autonómica valenciana (Cierval), José Vicente González, ha afirmado que la diferencia entre Cataluña y Valencia a la hora de reivindicar un nuevo modelo de financiación es que "Cataluña esgrime la independencia como arma y Valencia la equidad". González ha insistido en que la Comunidad Valenciana "sufre tres desequilibrios básicos con Madrid" relacionados con la infrafinanciación, la deuda y la falta de inversiones que "se confunden porque están relacionados".

En su opinión, la diferencia fundamental entre el discurso reivindicativo del presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, y el de Artur Mas en Cataluña, estriba en que "aquí no esgrimimos la independencia como arma, sino la equidad". Sobre la conveniencia de crear el "problema valenciano", como defiende el secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, el presidente de la patronal niega que el empresariado tenga intención de crear "problemas, sino soluciones", aunque insiste en "ponerse serios" y en que es necesario "subir el tono porque parece que Madrid no nos escucha y, si nos escucha, nos ignora".

"Tenemos la obligación de llevarnos bien y ayudar a los gobiernos a que hagan las cosas lo mejor posible desde la lealtad institucional, pero eso no significa decir a todo que sí. Creemos que lo que hacemos da un espaldarazo al Gobierno valenciano, que a fin de cuentas es interlocutor del Estado, pero necesitamos una solución política y quien decide, en última instancia, es Rajoy", ha añadido. Por lo que se refiere a la reforma del modelo de financiación, "el Estado no puede decir que esta parte de la tarta es mía y sobre esto no se discute", sino que "ha de poner de su parte".

"La infrafinanciación ha generado una deuda que simplemente no se puede pagar, no vamos a poder pagarla ni ahora ni nunca porque es superior a los 30.000 millones de euros y sigue subiendo. Es un disparate, consecuencia también de excesos que no deberíamos haber cometido", sentencia. Sobre el "tercer problema", el relativo a las inversiones, González ha recordado que ha remitido una carta a la ministra de Fomento, Ana Pastor, en la que reclama ciertas infraestructuras básicas en el plazo de 10 años, así como un incremento gradual de la inversión territorializada del Estado para compensar un déficit que cifra en 6.000 millones.

También cuestiona González que "no sea el momento político" de acometer una reforma del sistema de financiación autonómica por considerar que "quizá se refieren —en el Gobierno central— a que no es momento electoral". "Hay que reformarlo porque no tiene sentido, está mal hecho y esa es la solución definitiva. Ahora bien, si es por aquello del momento electoral... entonces hay otras soluciones. Como el Gobierno sabe que estamos muy mal financiados, porque las cifras no nos las inventamos, que adelante dinero, no préstamos", reclama.