Convergència y ERC desdeñan la propuesta centrista de Duran

La propuesta de movimiento centrista que lanzó el domingo el líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, perdió fuerza en pocas horas por el desdén que le dedicó su socio de federación, Convergència Democràtica. El democristiano reclamó que CiU fragüe una alianza de centro para frenar el crecimiento de los extremos en un contexto en el que, según las palabra del propio Duran, la federación pierde apoyos “cada día”.

Convergència considera que su estrategia ya representa el centro político, como dejó claro el vicesecretario de Coordinación Institucional de CDC, Lluís Corominas: “La centralidad es la salida a la crisis económica y el proceso soberanista; con esto lo que hacemos es ocupar la centralidad”, apuntó Corominas, que subrayó que no habrá virajes en CDC: “Esta es la posición en la que está la centralidad; no pensamos variarla”.

Pese a la pérdida de 12 escaños en las autonómicas y la victoria de ERC en las europeas, Corominas negó la pérdida de apoyos que reconocía Duran, apuntando que CiU ganó las elecciones catalanas y señalando el crecimiento de votos en las europeas de 2014, en las que los nacionalistas ganaron 100.000 votos con diez puntos más de participación.

La enmienda a la totalidad de las palabras de Duran y el tono de reproche que utilizó Corominas evidenciaron el malestar que la propuesta del democristiano generó en Convergència. Como en otras ocasiones, Duran no había consultado al socio de federación su idea antes de exponerla al público. El encontronazo supuso otro motivo de división en CiU. Las críticas de Corominas recibieron una respuesta rápida desde Unió Democràtica. Lo hizo el eurodiputado democristiano Francesc Gambús en Twitter: “Escuchar el discurso de Duran y exigirle lealtad al proceso: uno, no lo han escuchado; dos, no tienen intención de escucharlo en cualquier caso”.

Desacreditar las propuestas de Duran es una constante en Convergència desde que la federación forjó su alianza parlamentaria con ERC. Los republicanos están acostumbrados desde entonces a ser el blanco de las críticas de Duran, que en su propuesta centrista también dedicó críticas a ERC, burlándose de la apuesta por la independencia tachándola de “la palabra mágica que lo arregla todo”.

“La independencia no es una vía mágica pero si que es la vía emprendida por multitud de países del mundo, es algo muy normal en el contexto internacional”, le respondió el secretario general adjunto de los republicanos, Lluís Salvadó. El dirigente independentista no ve futuro en la propuesta de Duran, que considera “la enésima versión” de impulsar la tercera vía entre secesión y autonomía que abandera el líder democristiano.

Desde las antípodas ideológicas también se disparó contra Duran. El PP le emplazó a ser coherente y escoger entre la propuesta soberanista de CiU y su discurso centrista. El portavoz del PP catalán, Enric Millo, consideró que las declaraciones de Duran son “reveladoras” porque suponen un “reconocimiento explícito” de que CiU ha abandonado la centralidad.