La Alimentaria despide Barcelona con el premio al mejor cocinero del año
El alicantino Joaquín Baeza se hace con el galardón de la quinta edición del concurso
La Alimentaria de Barcelona toca a su fin sin perder intensidad. Las últimas horas del evento han concentrado todas las expectativas en la entrega del premio al cocinero estrella. Joaquín Baeza ha sido el esperado ganador del Concurso Cocinero del Año (CCA) que ha acogido el Salón Restaurama y que ha culminado su quinta edición en medio de una multitud de visitantes que han disfrutado de un ambiente festivo para despedir la feria de la alimentación celebrada en la capital catalana.
Baeza, un joven alicantino al frente del restaurante ‘Baeza & Rufete’ ha recibido el galardón emocionado y envuelto por una gran ovación del público asistente al cierre de la Alimentaria. El cocinero ha dedicado el premio a su madre, su hija y a su mujer, quien le ha acompañado en la aventura y ha saltado al escenario al saber el triunfo de su marido. La ocasión lo merecía: ganadores de ediciones anteriores del mismo concurso como Jordi Cruz (restaurante Abac, dos estrellas Michelin) o José Carlos Fuentes (restaurante Tierra, una estrella Michelin) son ejemplos de cómo el galardón puede suponer una oportunidad de futuro en el mundo de la gastronomía.
La final del CCA ha aglutinado durante las primeras horas de la tarde de hoy a muchos asistentes que han podido disfrutar de un espectáculo en toda regla. Los cocineros participantes han elaborado sus recetas en directo, bajo los flashes de las cámaras de muchos curiosos y sobre todo con un ojo puesto en el jurado, que ha sido el encargado de elegir a Joaquín Baeza como cocinero del año. El reconocido jefe de cocina Martín Berasategui (tres estrellas Michelin) ha liderado el jurado y ha librado el cheque de los 6.000 euros a Baeza por el menú que ha presentado el alicantino: escudella de garbanzos con lengua de cerdo de río, merluza con cocotxas, habitas y tendones de ternero y un parfait de haba tonka y vainilla con fresa del bosco.
No se han quedado sin recompensa los menús del barcelonés Albert Ortiz y el madrileño Chema Soler, quienes han quedado en segunda y tercera posición respectivamente y han recibido 3.000 y 1.500 euros por su logro en el pódium. Por su parte, Beatriz Bravo García, una joven madrileña se ha hecho con el galardón a la Mejor Camarera del Año, un concurso que estrenaba su primera edición y que ha aprovechado la Alimentaria para reivindicar la labor de los camareros del país, según han explicado los organizadores.
Al acto que ha puesto punto y final a la semana gastronómica en la capital catalana han asistido Lluís Bonet, presidente de Alimentaria y Josep Maria Pelegrí, consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. Bonet se ha mostrado “feliz” por haber culminado lo que para él ha sido una “magnífica Alimentaria” y por haber conseguido el objetivo de “avanzar hacia el futuro de la gastronomía española”. Pelegrí, por su parte, ha destacado la profesionalidad de los participantes en la feria y ha subrayado la importancia de la “innovación” en el campo de la gastronomía para hacer posible que la sociedad “conozca las maravillas” de la cocina del país.
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