La justicia cierra la investigación sobre el presunto espionaje a Camacho
El proceso no puede seguir adelante porque la líder del PP catalán ya "perdonó" a la agencia de detectives, según la resolución
La investigación sobre el supuesto espionaje a la líder del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, ha llegado a su fin. La Audiencia de Barcelona ha decretado el archivo definitivo del caso con el argumento de que Camacho otorgó, en su día, el “perdón” a la agencia de detectives Método 3, que grabó un almuerzo entre la dirigente y la exnovia de Jordi Pujol Ferrusola, Victoria Álvarez, en el restaurante barcelonés La Camarga. El cierre del caso deja sin respuesta la pregunta fundamental: ¿Quién encargó a la agencia que grabara el almuerzo?
Los indicios recogidos hasta la fecha apuntan al exsecretario de Organización del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), José Zaragoza, como el hombre que encargó la grabación a Método 3. Diversas fuentes, desmentidas de plano por el PP, apuntan que Zaragoza hizo la petición a instancias de la propia Camacho.
El almuerzo entre la dirigente y Victoria Álvarez se produjo en julio de 2010. Pero no fue hasta el pasado febrero cuando salió a la luz que el encuentro había sido grabado con un micrófono. Camacho anunció entonces que llegaría “hasta el final” para encontrar a quienes la habían espiado y denunció el caso. La pasada primavera, sin embargo, en un gesto que le valió multitud de críticas, alcanzó un pacto económico con el director de Método 3, Francisco Marco. A cambio de perdonar a la agencia y pedir el archivo de la causa, la agencia asumía su culpa en la custodia de la grabación, pero no admitía que la grabación hubiera sido ilegal.
La causa judicial impulsada por Camacho ha indagado si hubo revelación de secretos en la grabación del almuerzo. Se trata de un delito semipúblico, en el que el llamado “perdón del ofendido” extingue la responsabilidad penal. Pese a pedir inicialmente el archivo de la causa, la líder popular solicitó más tarde volver a formar parte del proceso, algo que la Sección Sexta de la Audiencia de Barcelona rechazó. Esa misma Sección es la que ahora ha decretado el sobreseimiento libre y archivo de la causa amparándose, precisamente, en que Camacho ya otorgó el perdón.
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