Tajo a las nóminas de Urbanismo
Córdoba somete a un duro ajuste salarial a los empleados de la Gerencia para ahorrar 1,1 millones e igualar sus salarios a los vigentes en el Ayuntamiento
La Gerencia Municipal de Urbanismo de Córdoba vive momentos difíciles. Las arcas del organismo autónomo se encuentran al límite y esta tensión amenaza el equilibrio presupuestario del Ayuntamiento de Córdoba, que trata de cerrar las cuentas para 2014 buscando un ahorro de 2,9 millones. Urbanismo se enfrenta a una grave crisis de liquidez. El consejo rector de este organismo autónomo aprobó el miércoles, con los votos en contra y en bloque de toda la oposición, una proposición para dejar sin efecto el convenio colectivo de la gerencia y ajustarse al máximo el cinturón.
La clave está en el ahorro de 1,1 millones que quiere arañar Urbanismo del total que gasta cada año en las nóminas de sus 139 trabajadores: 8,2 millones. El concejal de Hacienda, Gestión y Administración Pública del Ayuntamiento de Córdoba, José María Bellido, ha avisado de que ahora se abre un proceso negociado “tendente a igualar las retribuciones salariales del personal” de la gerencia con el del Ayuntamiento. “Aunque alcanzar el 100% de equiparación sea difícil, se intentará el máximo posible”, asegura.
Bellido también quiso suavizar el término “suspensión del convenio colectivo”. El edil de Hacienda puntualiza que no tumbarán todos, “sino determinados artículos, después de escuchar a todas las partes, que afecten a la masa salarial, con intención de igualarla totalmente al Ayuntamiento”. El concejal asegura que el objetivo es evitar despidos en la gerencia. Bellido ha recordado que Urbanismo, aunque sea un organismo autónomo, mantiene el pulso gracias a la continua aportación de capital que recibe en su torrente sanguíneo de parte del Ayuntamiento. Por tanto, “no tiene mucho sentido que en un órgano que depende financieramente de otro los sueldos sean más elevados” que los propios del Ayuntamiento.
El miércoles, cuando los vocales del consejo rector de la gerencia se reunieron, no estaba nada claro para los representantes de la oposición (PSOE, UCOR e IU) que los empleados de la gerencia fuesen a poder cobrar sus nóminas con puntualidad en diciembre ni la paga extraordinaria de Navidad. Bellido también calmó los miedos al subrayar que “no corren peligros las nóminas” de los trabajadores, que tiene “aseguradas sus transferencias de aquí a fin de año”. Y todo ello, a pesar del duro informe de Intervención que se opone a la transferencia de 638.000 euros desde el Consistorio a la gerencia para sanear el remanente negativo de Urbanismo.
La delicada situación de la gerencia es un campo abonado para la oposición. El coordinador de IU en Córdoba, Galileo Florido, y la concejal de esta formación en el Ayuntamiento Josefa Contreras han censurado “la mala gestión y la incapacidad” del Gobierno local para elaborar los presupuestos y que tengan que “pagar” a los empleados.
Por su parte, el portavoz municipal del PSOE en el Ayuntamiento de Córdoba, Juan Pablo Durán, y el concejal socialista Emilio Aumente han criticado que el gobierno local “imponga decisiones unilaterales”, como la suspensión parcial del convenio colectivo de los trabajadores de la gerencia —con reducciones de sueldo, que el PSOE cifra en torno al 30%— y luego convoque a los grupos del Consistorio para negociar el presupuesto de 2014 y hable de “consenso”. Durán ha señalado que “nunca estaremos a favor de que a los trabajadores se le impongan decisiones para reducir sueldos, derechos o cualquier otra garantía de forma unilateral”.
El pasado viernes se celebró la última reunión entre el Consistorio y los sindicatos. Ese mismo día, CC OO se mostró favorable a la equiparación salarial de los empleados de la gerencia y los trabajadores del Ayuntamiento. Por su parte, el sindicato CSIF lamentó “la falta de información y la premura” con la que el Ayuntamiento de Córdoba quiere llevar a cabo el proceso de ajuste laboral en la plantilla municipal. Esta semana, el alcalde José Antonio Nieto mantendrá abiertas las negociaciones con sindicatos y grupos políticos de la oposición.
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