Bilbao prohíbe abrir nuevos pubs en los bajos de edificios de viviendas

Los pubs y discotecas que se abran en Bilbao a partir de ahora no podrán estar situados en edificios de viviendas ni a menos de 200 metros entre sí, según ha aprobado este jueves el pleno del ayuntamiento de la capital vizcaína, bajo la presidencia de Iñaki Azkuna.

Con los únicos votos a favor del PNV, que dirige el gobierno municipal y tiene mayoría absoluta en el pleno, la corporación ha dado luz verde a la modificación urbanística y a la nueva ordenanza a la que estarán sujetos los establecimientos de hostelería de Bilbao.

La normativa también introduce como novedad la prohibición de venta de alcohol en horario nocturno (de 22.00 a 7.00 horas) a locales comerciales con el objetivo de evitar el "botellón".

Con el nuevo marco, el ayuntamiento se adecúa a la reglamentación del Gobierno vasco a efectos de horarios de cierre y simplifica el sistema de distancias hasta ahora en vigor.

Prohibida la venta de alcohol en horario nocturno (de 22 a 7 horas)

En primer lugar, con el sí del PNV, el voto en contra del PSE-EE y la abstención del PP y EH Bildu, el ayuntamiento ha aprobado definitivamente la modificación del Plan General de Ordenación Urbana, ya avalada por el pleno el pasado mes de abril, por la que se impide la implantación de pubs y discotecas en edificios residenciales, de alojamiento o en residencias comunitarias.

El consistorio pretende conciliar el derecho al descanso de los vecinos con la existencia de alternativas de ocio nocturno. Los establecimientos de ese tipo ubicados actualmente en edificios de viviendas quedarán en "situación tolerada", dado que la medida no tiene carácter retroactivo.

Después, también con el respaldo del PNV, la posición contraria de los socialistas y EH Bildu y la abstención del PP, el pleno ha dado luz verde de forma definitiva a la nueva ordenanza de hostelería.

El teniente alcalde Ibon Areso ha destacado que la adecuación de la normativa de hostelería a los criterios del Gobierno vasco pretende "no volver loco al administrado". Ante las críticas de algún grupo de que faltan locales en Bilbao para salir por la noche, Areso ha destacado que hay 165 establecimientos de ese tipo.

El portavoz del PSE-EE, Alfonso Gil, ha insistido en considerar que en Bilbao se está generando la figura del "exiliado del ocio, con un aumento de los autobuses de jóvenes que se van a ciudades limítrofes", y ha opinado que la ciudad "no es atractiva para el ocio".

La concejala de EH Bildu Ana Etxarte ha dicho que la normativa recoge unas modificaciones que van encaminadas a "seguir liberalizando el sector de la hostelería", lo que, a su juicio, va a "acentuar los conflictos" hoy existentes.

Luis Hermosa, representante del PP, ha mostrado su desacuerdo con algunas medidas relativas a la ampliación de los establecimientos y ha considerado que el equipo de gobierno se escuda en el medioambiente para establecer "limitaciones" en la distancia entre los establecimientos. La nueva ordenanza determina que los bares y restaurantes (grupo II) con horario nocturno deberán guardar una distancia de 30 metros entre ellos, pero los pubs y discotecas (grupo III) tendrán que estar como mínimo a 200 metros unos de otros.

La distancia de los 200 metros ya se recogía en la anterior normativa, que elevaba a 500 metros la separación entre locales con aforo superior a 700 personas, aunque en la nueva reglamentación se precisa que la limitación entre pubs y discotecas será "siempre" de 200 metros entre sí.

Otra novedad de la normativa es que el ayuntamiento admitirá la posibilidad de "traslados" de actividad a los restaurantes, cafeterías y bares cuyos regentes pudieran verse afectados por "cláusulas o rentas de alquiler abusivas".

Se permitirá el traslado de la actividad hostelera a otro local en el mismo barrio (hasta un máximo de 250 metros entre ambos), siempre que se renuncie a la licencia de actividad existente hasta el momento, para evitar el aumento de establecimientos en la zona.

Una disposición adicional establece la prohibición de venta de alcohol en horario nocturno (de 22 a 7 horas) a establecimientos comerciales con el objetivo de evitar el "botellón".

También de forma novedosa, el ayuntamiento autorizará la ampliación en superficie de los locales del grupo II, aunque supongan una mínima reducción del sistema de distancias (30 metros entre ellos), pero no mayor al 25 %. Se prevé, además, una "mayor flexibilidad" en el diseño exterior de los locales diurnos sin equipo musical.

Pese a la simplificación del sistema de distancias mínimas, la nueva ordenanza contempla la posibilidad de establecer restricciones a la implantación de nuevas actividades en zonas que, de acuerdo con la legislación medioambiental, se consideren "saturadas de ruido".