Un modelo nuevo para las personas
El autor reclama una nueva financiación con el mismo gasto per capita en los servicios básicos
Desde la Comunitat Valenciana queremos proponer un nuevo sistema de financiación que sea justo e igualitario y que garantice la prestación de los servicios públicos fundamentales, como la sanidad, la educación o el bienestar social, sobre todo, para los colectivos más desfavorecidos. Para ello encargamos hace unos meses al Alto Consejo Consultivo, formado por expertos del más alto nivel, premios Jaime I de Economía, un informe que ayer fue presentado y que avala lo que desde la Generalitat hemos estado denunciando desde hace mucho tiempo: la infrafinanciación de nuestra tierra.
Desde 2001, la Comunitat ha dejado de percibir cerca de 13.000 millones de euros con respecto a la media del resto de autonomías y ha tenido un crecimiento de la población mayor que el de otros territorios que no ha sido compensado con un incremento de su financiación. Otro ejemplo, avalado por el informe, es que nuestro nivel de eficiencia en la gestión de servicios públicos esenciales es un 14% superior al de otras regiones, lo que indica que gestionamos bien y que el problema es que no obtenemos los ingresos suficientes.
Creemos que la financiación debe estar ligada a la prestación de servicios y a la eficiencia en la gestión y ésta es la reivindicación que, con la base sólida del análisis realizado, queremos hacer llegar a toda España. Nuestra propuesta es que las transferencias del Estado garanticen las prestaciones de los servicios fundamentales sanitarios, educativos y sociales, competencia de las comunidades autónomas y prestados de forma eficiente para que todos los territorios puedan ofrecer la misma cartera de servicios. El objetivo es que los españoles, independientemente de dónde vivan, puedan disfrutar del mismo Estado del Bienestar.
La Comunitat Valenciana ha dejado de percibir cerca de 13.000 millones de euros"
Los criterios a seguir deberían ser de población ajustada, atendiendo al crecimiento y el envejecimiento de las personas y a la ruptura del statu quo de los modelos anteriores. No se trata de buscar privilegios, sino de pedir lo que es justo. Para nosotros y para el resto de los españoles. Lo que planteamos es un sistema que no esté al arbitrio de componendas o presiones territoriales.
Apostamos por la solidaridad interterritorial, por dar a todas las comunidades las herramientas para que todos los españoles tengamos las mismas oportunidades. Sin embargo, hay que tener en cuenta un punto que destaca este informe, y no es una apreciación baladí, advirtiendo de que hay que tener cuidado con la solidaridad mal entendida. El documento califica de “inquietante” que en lugar de resultar un incentivo, estas transferencias solidarias se puedan acabar apreciando por las comunidades receptoras como un “ingreso complementario habitual” con el consiguiente peligro de que se frene, incluso, el crecimiento del PIB. En la Comunitat Valenciana estamos culminando la reestructuración de nuestro sector público empresarial, cuyo nivel de ejecución está por encima de la media nacional. Hemos eliminado gastos superfluos reduciendo, por ejemplo, el parque móvil en más de un 50%, seguimos eliminando duplicidades y trabajamos por reducir el número de diputados autonómicos entre otras muchas medidas de optimización de los recursos y eficiencia en el gasto.
No se trata de buscar privilegios, sino de pedir lo que es justo"
Por eso, los valencianos podemos reclamar con justicia este cambio en el modelo de financiación y lo hacemos desde la serenidad, desde la razón y el análisis. Con argumentos y sólidas bases. Sin hacer victimismo. Cuanto antes cambiemos el modelo de financiación, antes se verán los efectos de la recuperación económica en España.
Creemos que esta propuesta planteada por el Alto Consejo Consultivo es una buena base para debatir, para dialogar, y llegar así a un consenso entre todos, ya que es un modelo sencillo, transparente y acorde con los principios constitucionales de justicia, igualdad y solidaridad interterritorial.
Iniciemos una reforma que, indudablemente, tendrá beneficios para toda España. Es cierto que, con un modelo justo, se corregirá el agravio crónico que la Comunitat Valenciana ha sufrido desde el nacimiento del Estado de las Autonomías en materia de financiación. Pero no se trata solo de la Comunitat valenciana. Hablamos de la igualdad de todos los españoles, con independencia de dónde hayan fijado su residencia. Hablamos de cumplir con el mandato de la Constitución. Hablamos, en definitiva, de justicia, equidad y bienestar social para todos.
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