Isofotón deja en evidencia a la Junta
La empresa malagueña pende de un hilo tras recibir 62 millones en una década
El futuro de la planta malagueña de energía fotovoltaica Isofotón pende de un hilo después del anuncio de que prepara un ERE que puede afectar a la totalidad de la plantilla (299 trabajadores). En junio fueron despedidos 352 empleados en otro expediente de regulación de empleo que se justificó, como el actual, en las dificultades económicas de la empresa, en concurso voluntario de acreedores desde principios de verano por una deuda de 184 millones de euros. El número de puestos de trabajo que se mantengan dependerá de la carga de trabajo, pero se trata del ocaso de una factoría que ha sido líder a nivel mundial en tecnología mundial y fuertemente subvencionada por la Junta. Desde 2003, Isofotón ha recibido 62 millones de euros en subvenciones, préstamos, avales y subsidiación de intereses. De poco han servido para mantener el empleo.
La sentencia de la Sala de lo Social del TSJA que recientemente ha considerado "ajustado a derecho" el ERE presentado en junio detalla el dinero público concedido en la última década por la Junta, que durante unos años (a principios de los 90) tuvo participación en la empresa. En octubre de 2003, por ejemplo, otorgó un préstamo de 2,5 millones de euros para la construcción de la nueva planta de Isofotón en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) y casi un año después, dio otro de 1,1 millones para equipar la factoría.
Ha habido varias subvenciones para incentivar la producción. Desde que el grupo Affirma tomó el control de la empresa en junio de 2010, el Gobierno andaluz ha concedido sendos avales por 12 millones de euros cada uno y un préstamo de 8,2 millones, el único que la Junta ha pedido que se devuelva porque, alega, no se han cumplido los objetivos para el que fue entregado.
Fuentes de la Consejería de Economía apuntan que no todas las ayudas “se pueden poner en tela de juicio”, porque se conceden para fines concretos que se cumplen, y que la Junta ha actuado en todos los frentes “para salvaguardar los intereses públicos”. En el terreno administrativo, se abrió un expediente para pedir el reintegro de esa ayuda de 8,2 millones de euros, concedida en agosto de 2012, porque era finalista y estaba sujeta a la firma de un contrato con Samsung. Está en trámite. Penalmente, denunció ante la fiscalía una presunta estafa en relación a ese préstamo, pero el ministerio público ha archivado las diligencias al considerar que no ha existido delito. Desde Economía sostienen que acaban de recibir la notificación y que estudiarán si recurren a otra vía. Las fuentes añaden que la Junta también está personada en el concurso de acreedores de Isofotón y que cuando se resuelva, existe la posibilidad de que “sea resarcida”. “Los avales tienen una garantía”, recalcan.
Lo que han rechazado PSOE e IU en el Parlamento andaluz es crear una comisión de investigación sobre la gestión, el control y el resultado de las ayudas otorgadas a Isofotón, petición cursada por el PP. La decisión se adoptó el jueves, el mismo día que se planteó el nuevo ERE en la empresa. El delegado del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, pidió ayer a la dirección de la factoría que estudie otros planes que no lleven a su “desaparición”. “Es una empresa en la que la Junta ha hecho un gran esfuerzo permanente durante los últimos años, y en la que todas las ayudas han ido dirigidas a favorecer el empleo y a establecer que los proyectos fueran viables”, añadió.
Los trabajadores tienen previsto celebrar una asamblea el lunes para analizar su situación. La empresa no les ha dado garantías de que puedan cobrar los sueldos pendientes y quien permanezca en la plantilla, sufrirá una fuerte reducción salarial.
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