Maíllo dice que el presupuesto no será el “ideal” sino el “posible”
IU exige la renuncia a privatizaciones y a los “despidos masivos” en la función pública
El coordinador general de IU, Antonio Maíllo, admitió este viernes que Andalucía no contará con un presupuesto “ideal” en 2014, sino que será un “presupuesto posible, diferente y justo”. El responsable del partido que Gobierno con el PSOE en la Junta de Andalucía, matizó así a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, quien un día antes afirmó que habrá un “buen presupuesto”.
El coordinador de Izquierda Unida afirmó que la preservación de los servicios públicos es una “línea roja” del presupuesto andaluz y que no va a permitir que haya privatizaciones en servicios tan básicos como la educación, la sanidad o prestaciones sociales.
“Todo eso requiere un esfuerzo”, afirmó para admitir que la elaboración del presupuesto para el próximo ejercicio está siendo tremendamente “complicada”. “Tenemos que ver dónde podemos ajustar en los elementos más superfluos”, indicó Maíllo, para quien lo fundamental es hacer unos presupuestos “justos”, que no supongan una caída del “ensamblaje publico, que es el que garantiza la atención a los ciudadanos en igualdad de condiciones”.
Ni privatizar ni despedir
Los presupuestos estarán el día 31 en el Parlamento tras una complicada negociación marcada por la renuncia a privatizaciones para obtener una liquidez inmediata y a los “despidos masivos” en la función pública.
“Todo esto hace que la confección del presupuesto sea más complicada, porque queremos que sea justo”, sentenció el dirigente de IU, para quien Andalucía cuenta con un Gobierno “diferente” al de otras comunidades y, por lo tanto, tiene que hacer también unos presupuestos diferentes.
El coordinador de IU también dijo que el Gobierno andaluz tiene que defender el Estatuto de Autonomía y no puede permitir la reforma local que promueve el Ejecutivo nacional. En este sentido, los alcaldes de IU solicitarán a la Junta, si la reforma local se aprueba con la actual redacción, que presente un recurso de inconstitucionalidad contra la misma, porque supone un “atentado contra la autonomía local”, y que demande que se quede sin efecto mientras se resuelve dicho recurso.
Maíllo afirmó que no va a parar de movilizar a la gente contra esa reforma local porque supone un “ataque” a la calidad de vida de los ciudadanos, al abrir las puertas a la privatización de servicios básicos, como el de agua.
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