Duran advierte de que unas elecciones plebiscitarias podrían romper CiU
El líder de Unió se queja de no haber recibido el informe de agravios de la Generalitat En "aplicación estricta" del Estatut sólo procede reivindicar 759 millones, según Duran
El líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, ha vuelto esta mañana a distanciarse de la hoja de ruta soberanista que defiende su socio de federación, Convergència. El democristiano ha dudado de la viabilidad de la independencia de Cataluña y ha asegurado que CiU corre el riesgo de romperse en caso de elecciones plebiscitarias. "Si hay un momento determinado en que los planteamientos de CDC puedan ser insostenibles para UDC y al revés, esto podría romperse", ha dicho Duran en una entrevista en los Desayunos de TVE. Más tarde ha ejemplificado cuándo se podría producir este desencuentro. "Imagínese que llega un día en el que se convocan elecciones plebiscitarias, y se equipara votar a CiU solo con independencia. Aquí UDC puede encontrarse incómoda", ha avisado Duran, pese a reiterar el buen funcionamiento y resultados obtenidos por la federación en Cataluña y el resto de España desde su unión, en 1977. También ha comparado la relación entre CDC y UDC con la convivencia de una pareja, destacando que si no hay entendimiento se puede romper: "No expreso el deseo de que se rompa, aunque es algo natural que puede llegar".
Las elecciones plebiscitarias -unos comicios en el que los partidos a favor de la secesión se presentarían con la promesa de la independencia- son el plan B previsto por el presidente de la Generalitat, Artur Mas, en caso de que el Estado vete una consulta sobre la independencia. CiU siempre ha marcado el referéndum sobre la independencia como el horizonte de su relación, ya que los dos partidos no comparten el camino a seguir después: CDC apuesta por la independencia, y Unió por un Estado confederal.
El democristiano también ha avisado de que su partido no avalará una consulta ilegal. Una opción defendida por el sector más soberanista de CDC, pero que no cuenta con el aval de Mas. El presidente catalán modificó sus planteamientos tras el verano y ahora supedita la votación sobre la independencia a una consulta legal. Duran ha defendido que en la consulta soberanista, asunto del que ha dicho Gobierno y Generalitat aún no negocian, una pregunta de "independencia sí o no" no sería la que "aglutinaría a más partidos" y ha advertido de que la declaración unilateral tendría "poca trascendencia jurídica" y que una Cataluña independiente quedaría fuera de la UE.
El responsable de Unió se ha quejado hoy de no haber sido consultado ni haber recibido el "informe de deslealtades" del Estado elaborado por la Generalitat y ha subrayado que en "aplicación estricta" del Estatut sólo procede reivindicar 750 millones de euros de la disposición adicional tercera. El democristiano ha recordado que la disposición adicional tercera del Estatut, una demanda histórica del ejecutivo catalán relativa al montante de inversiones del Estado en infraestructuras equivalente al PIB, el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional que fuera de obligado cumplimiento. Así pues, "en aplicación estricta" del Estatut, reivindicar las cantidades de cada año de la disposición adicional "no es correcto", ni "justo", salvo los 750 millones de euros de 2008, que la Comisión Bilateral Estado-Generalitat reconoció como deuda y que no se han abonado, ha afirmado Duran.
El líder democristiano ha admitido que no está "muy satisfecho" de conocer el contenido del informe de la Generalitat por los medios de comunicación cuando preside la parte catalana de la Comisión Bilateral Estado-Generalitat, y ha lamentado no haber sido consultado previamente: "Parecería lógico que alguien me pregunte si las demandas -del informe- son ciertas o no", ha indicado.
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