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Un proyecto rodeado de humo

Las dudas sobre si se podrá fumar en Eurovegas, una competencia estatal, han desatado las hostilidades entre la Comunidad y el Gobierno, ambos del PP En La Moncloa insisten que el problema es de financiación

José Marcos
Sheldon Adelson (tercero por la izquierda) y su esposa junto a representantes públicos durante su visita a los terrenos de Eurovegas en Alcorcón, en mayo de 2012.
Sheldon Adelson (tercero por la izquierda) y su esposa junto a representantes públicos durante su visita a los terrenos de Eurovegas en Alcorcón, en mayo de 2012. comunidad de madrid

La primera piedra de Eurovegas se iba a colocar en diciembre. Como tarde, en enero del año que viene. Los movimientos de tierras y demás tareas previas a la construcción del megacomplejo de casinos y congresos generarían, de entrada, 10.000 contratos de trabajo, lógicamente del sector de la construcción y otros empleos asociados indirectamente. De los 15.000 desempleados de Alcorcón, elegida por Las Vegas Sands para su desembarco en la Unión Europea, 4.000 contaban con ese perfil.

La expectación alcanzó tales cotas que el PP de Parla realizó una campaña de recogida de curriculum de interesados en obtener un empleo de los 250.000 (entre directos, indirectos e inducidos) que la promotora prometía sobre el papel, mientras el alcalde, José María Fraile (PSOE), pedía directamente “Eurovegas para Parla”. A falta de tres meses para la llegada de diciembre, todas las previsiones han saltado por los aires. La que supuestamente iba a ser la inversión más importante de toda Europa, con 17.000 millones de euros, “corre serio riesgo de irse a otro sitio”, reconoce el presidente de la Comunidad, Ignacio González.

La ciudad deportiva del Atlético, en el aire

El futuro de Eurovegas inquieta no solo al Gobierno regional y al alcalde de Alcorcón, David Pérez (PP). El Atlético también se juega mucho en la operación. En concreto, su futura ciudad deportiva. En 2006 Esperanza Aguirre suscribió un acuerdo para impulsarla en Alcorcón dentro de un convenio urbanístico —basado en la construcción de más de 22.000 viviendas, el 60% protegidas, con al menos 4.350 pisos del Plan Joven regional— que también contó con el visto bueno de Enrique Cascallana, alcalde de la localidad por el PSOE hasta su derrota en 2011.

La ciudad deportiva (para la que también se pensaron como sede Boadilla y Getafe) contaría con 120 hectáreas, en las que se repartirían ocho campos de fútbol, un miniestadio, un club social y un centro de alto rendimiento. Reemplazadas las viviendas por el proyecto de Las Vegas Sands, la incertidumbre existente coincide con las obras que el Atlético está realizando en el Cerro del Espino, en Majadahonda, donde se entrena habitualmente.

Más allá de las dudas en sí que provocan las cifras mareantes de Eurovegas o su financiación, que no sea así depende básicamente de que se reforme la ley antitabaco, una competencia estatal, para que en los casinos de Sheldon Adelson se pueda fumar “en espacios restringidos”. La tibieza y ambigüedad con la que el Ejecutivo de Mariano Rajoy venía tratando un asunto tan sensible, especialmente espinoso para la ministra de Sanidad, Ana Mato, está detrás de la bronca que esta semana estalló de forma oficial entre el Gobierno madrileño y el español... Y por extensión entre el PP regional, el más poderoso del país, y la dirección nacional del Partido Popular.

Fumar nunca ha sido negociable para Adelson. Si algo han tenido claro quienes a lo largo de los últimos seis años han participado en las negociaciones para echarle el lazo a Eurovegas era que el consumo de tabaco debía ser legal. Y que Adelson lo quería por adelantado, por ley, antes de invertir un solo euro. El magnate del juego y accionista mayoritario de Las Vegas Sands así lo transmitió cuando empezó las conversaciones con Miguel Sebastián, el ministro de Industria en la segunda legislatura del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero. El mismo mensaje recibieron Esperanza Aguirre en su condición de presidenta de la Comunidad y González, su vicepresidente durante nueve años y presidente desde hace uno. El mismo presidente del Gobierno de la nación pudo comprobarlo de primera mano en las dos recepciones con las que agasajó a Adelson en La Moncloa, otorgando al empresario de nacionalidad estadounidense e israelí y republicano un trato a la altura de un jefe de Estado. “[Eurovegas] es un buen proyecto, lo apoyamos”, dijo Rajoy.

Las quejas de la Comunidad dan a entender lo contrario y reprochan la “lentitud” de la Administración Central. En su tercer mes como presidente de Madrid, González ya había diseñado y aprobado una normativa al gusto del proyecto de Adelson. Con toda una batería de rebajas y exenciones fiscales criticadas por la oposición como “un traje a medida”. Bajando, por ejemplo, el tipo máximo sobre el juego del 45% a un tributo único del 10%. O bonificando con un 95% el impuesto de transmisiones patrimoniales de las inversiones similares a Eurovegas.

El cambio de actitud de Mato, que el miércoles rompió su silencio relativo a Eurovegas y admitió que buscaba “fórmulas” para fumar en sus casinos, ha aliviado las diferencias. Aunque no se puede hablar de una tregua entre el PP que gobierna España y el PP que gobierna Madrid, muy escocido después de que la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría planteara que la Asamblea de Madrid presente una iniciativa legislativa pidiendo una legislación antitabaco más permisiva. El PP que lidera Aguirre entiende que es una excusa para salir al paso y que la hubieran presentado hace un año si se lo hubieran “insinuado”.

Ante las críticas recibidas estos días, el ministro de Industria, José Manuel Soria, asegura hoy en una entrevista en este diario que “todos los compromisos alcanzados se van a cumplir”. “Si [el marco legal] depende del Gobierno español, se hace”, afirma conciliador con Madrid, que insiste que ha hecho “todo lo que tenía que hacer” y que lo que falta depende de la Administración Central.

La estrategia de Soria es echarle toda la presión a Las Vegas Sands: “El problema es el de la financiación. No sé si la encuentran. Son ellos los que la buscan”. El consejero delegado de Las Vegas Sands, Michael Leven, ha afirmado en varias ocasiones que el dinero “está asegurado”. Frente a las dudas que alimentan Soria o los analistas de Deutsche Bank y JP Morgan, en la Comunidad se agarran a las promesas de la multinacional estadounidense. La firma debería poner 2.700 millones de su caja para empezar las obras, y a partir de 2014 iba a contar con otros 4.000 millones prestados por inversores y bancos.

Otro frente sin resolver es el del juego online, al que Adelson ve como una amenaza. Madrid ha firmado precisamente esta semana un convenio con Castilla y León que permitirá jugar simultáneamente al bingo electrónico en las dos autonomías. Esta modalidad se inició en la región en diciembre de 2012 y su volumen de negocio en el primer semestre de 2013 ha sido de 10 millones. La previsión es alcanzar los 20 millones a final del ejercicio. El convenio firmado “no influye para nada” en el futuro de Eurovegas, según el Gobierno de González.

Entretanto, la incertidumbre que rodea a Eurovegas aumenta conforme transcurren las semanas. Para empezar, que el complejo entero esté listo en 15 o 18 años, con unos rascacielos que se convertirán en los edificios más altos de España. La intención de que la primera de las tres fases previstas estuviera concluida para 2017, con cuatro hoteles y dos casinos, suena a utopía. Sin ir más lejos, a estas alturas el concurso para adjudicar el proyecto —no se sabe de más candidatos aparte de Adelson— debía estar ya resuelto. El mismo González calculaba esta semana que, una vez cerrada esa fase del proceso, las obras no se iniciarían hasta un año después.

Mientras, los propietarios de las 750 hectáreas donde iría Eurovegas, desde vecinos de toda la vida de Alcorcón a terratenientes como Metrovacesa —dueña de casi 1,5 de los 12 millones de metros cuadrados del Distrito Norte, donde se posicionó en 2006 a unos 84 euros el metro cuadrado— no tienen noticias del proyecto desde antes del verano. “En marzo nos temíamos que la Comunidad nos iba a expropiar a precio de saldo. Ahora...”, cuenta uno de los dueños, que no sabe si seguirá labrando la tierra, le comprarán las parcelas “malamente” o “saldrá de pobre” vendiéndolas “a los precios de antes de la crisis”. A la espera de que los políticos se aclaren, el distrito Norte de Alcorcón sigue siendo un secarral. Y en el aire queda un proyecto grandilocuente que podría quedarse en humo. Lo que es actualmente.

China endurece la legislación en Macao

El Palazzo de Las Vegas, el Venetian de Macao y el Marina Bay Sands de Singapur, todos de Sheldon Adelson, no huelen a tabaco. Los sistemas de ventilación y antiolores son tan eficientes que resulta complicado tener una sensación ahumada siquiera en la antigua colonia portuguesa en China, que cada día atrae a miles de clientes dispuestos a disfrutar simultáneamente de dos de las grandes pasiones nacionales: el juego —en la cinematografía china abundan las historias de don nadies que dan el gran salto adelante gracias al azar— y el tabaco.

Con todo, por más que fumar es visto como un símbolo de poder y respeto (Mao fue retratado con un cigarrillo en la mano), Pekín ha endurecido la legislación. Tras un periodo de gracia de un año, los casinos de Macao están obligados desde enero de 2013 a habilitar zonas separadas para fumadores y no fumadores. Los espacios reservados para los clientes que no fumen podrán ser de hasta el 50% de la superficie de los locales. La multa que afrontan los infractores es de 40 euros.

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Sobre la firma

José Marcos
Redactor de Nacional desde 2015, especializado en PSOE y Gobierno. Previamente informó del Gobierno regional y casos de corrupción en Madrid, tras ocho años en Deportes. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de Periodismo de EL PAÍS. Trabajó en Starmedia, Onda Imefe y el semanario La Clave.

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