ERC ve la puerta cerrada al diálogo tras la carta de Rajoy

“No, no y no”. Esta es la respuesta que leyó Esquerra Republicana en la carta que el presidente Mariano Rajoy envió a Artur Mas en relación a la solicitud del líder catalán para convocar una consulta sobre la independencia de Cataluña. El Gobierno catalán interpreta que la misiva de Rajoy deja espacio para el diálogo. Un diagnóstico del que discrepa el socio del Ejecutivo catalán. “Hay quién ha querido ver puertas abiertas. Nosotros lamentamos que se hable siempre de legalidad como un freno”, ha asegurado esta mañana la portavoz de ERC, Anna Simó. “Nosotros leemos un no, no y no a nada de los que nos pidas”. Los republicanos exigen a Rajoy que se estudie las cinco opciones que, según el Consejo Asesor de la Transición Nacional de Mas, permiten convocar el referéndum respetando la constitución. “No hay limitaciones jurídicas si hay voluntad política”, ha dicho Simó. ERC considera que en la carta hay “indolencia” y que en su texto se deja claro que “prohíbe el derecho a decidir”.

Esquerra ha insistido en los últimos meses que intentar dialogar con el Gobierno es tarea inútil, si bien avalan la estrategia del Gobierno de Mas. Simó ha asegurado que ERC siempre apuesta por el diálogo, aunque no tiene “muchas esperanzas al respecto, por no decir ninguna”. La portavoz republicana ha recordado los antecedentes de negociación entre Cataluña y el resto de España y el comportamiento del PP. “Apelando a la memoria más reciente, el intento de encontrar un nuevo estatus acabó con un monólogo en el Tribunal Constitucional”, ha señalado en referencia al Estatut, tras recordar que el PP “recogió cuatro millones de firmas contra el texto, en una actitud prácticamente guerracivilista, de enfrontar a unos con otros”. Simó también ha citado la negociación sobre el pacto fiscal como otro fracaso de la negociación con el Gobierno.

El socio parlamentario de CiU se sumará al texto unitario que Mas quiere promover en el Parlament como respuesta a la carta de Rajoy. Simó ha indicado que el debate de política general, que se celebrará la semana que viene en el Parlament, será una buena ocasión para encontrar un punto en común en los defensores del referéndum. ERC tiene clara cuál debe ser la respuesta: seguir adelante para convocar la consulta en 2014.