Pedalear cuesta arriba será más barato

Pedalear cuesta arriba, de mar a montaña, podría ser más barato para los usuarios del Bicing que hacerlo en sentido contrario. Este es uno de los ejemplos del nuevo modelo de sistema tarifario, con horizonte de 2015, que ayer presentó el Ayuntamiento de Barcelona, liderado por Xavier Trias (CiU). La idea, compartida con algunas entidades, es que se haya un pago inicial y luego el coste se fije por un sistema de incentivos y penalizaciones, no una tarifa plana, como ahora. El Consistorio confirmó que para el próximo año el precio solo subirá el IPC. La tarjeta hoy cuesta 46,46 euros.

La propuesta de la regiduría de Movilidad, encabezada por Eduard Freixedes (CiU), propone un precio para hacerse socio más reducido que el actual, incorporando descuentos para jóvenes y jubilados. A partir de esta tarifa, se cobraría más (o menos) por recorrido de acuerdo con cuatro modalidades, según los planes iniciales. La primera es si se realiza en temporada alta (de abril a octubre) o baja. Los viajes dentro de la última estarían bonificados. La segunda modalidad es el tipo de viaje, es decir, si se realiza entre mar y montaña o viceversa. La idea es que los viajes cuesta arriba sean más baratos que los de bajada. Uno de los principales problemas logísticos —y costes— para Clear Channel, operador del servicio, es tener que llevar las bicis de las estaciones de la playa a los de cotas más altas de la ciudad.

La duración del viaje también podría ser tenida en cuenta. Los recorridos de más de una hora serían más caros que los de menos tiempo. Finalmente, se establecerán bonificaciones a partir del número de usos realizados en un período concreto y un descuento por tramos. Así mientras más viajes se realicen, más económico podrá ser el precio por viaje. Todo esto tendrá que ser acompañado de un nuevo modelo de facturación periódica y detallada para controlar el servicio.

El modelo empezará a ser debatido en el seno de la comisión que se creó en el otoño pasado para intentar encontrar un modelo más eficiente para el servicio público de bicicletas. Después de establecer el modelo, se comenzará a hablar de precios, el tema verdaderamente espinoso. Los abonos solo pagan el 28% del total del servicio, que cuesta 12 millones de euros.

En 2012, Trias intentó subir el precio el 116% por el abono ilimitado. La iniciativa contó con el rechazo de la oposición y los usuarios de la bici, lo que hizo que el Gobierno municipal retirara la modificación. Trias abrirá el debate en pleno año electoral, algo que seguramente le generará dolores de cabeza. Hay 120.000 abonados al Bicing y se realizan 53.000 usos en un día laborable.