“Un pinchazo en agosto es un reventón para todo el año”
José Carlos Escribano es el presidente de la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol
Mayo y junio han sido unos meses muy buenos para el sector turístico de la Costa del Sol. El arranque de la temporada alta deja cifras esperanzadoras, con repuntes tanto en el número de visitantes nacionales como extranjeros. Se habla del verano de la recuperación, con los hoteles casi al completo. Pero José Carlos Escribano (La Línea, 1963), presidente de la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos), prefiere ser cauto y hacer balance tras el mes estrella del verano: agosto. “No hay que quedarse con las cifras buenas del arranque de temporada, un pinchazo en las cifras de agosto es un reventón para todo el año”.
Pregunta. Tras un invierno tan rudo, con 270.000 estancias menos en la Costa del Sol, y una Semana Santa casi de trámite ¿Se esperaba un arranque de la temporada alta tan bueno?
Respuesta. Ya llevábamos dos veranos en los que las cifras no eran tan negativas, con repuntes de pernoctaciones en verano, de mayo a octubre. La sensación era que esas cifras se consolidaran este verano. El duro invierno que ha padecido Europa está haciendo que nuestro clima y el segmento de sol y playa estén teniendo más peso aún si cabe. A esto hay que añadir factores puntuales como las tensiones políticas que se viven en países del norte de África, que están repercutiendo beneficiosamente en la Costa del Sol.
P. Se habla de cierta recuperación del mercado nacional, lo que junto a otros emergentes como el ruso puede hacer que se superen los 4,9 millones de visitantes del pasado verano…
Repunte y buenas previsiones
- Durante mayo y junio el número de viajeros que han pasado sus vacaciones en Andalucía ha aumentado un 6,5% con respecto al mismo periodo del año anterior. Se debe al crecimiento del turismo internacional (7,7%) y a la subida del nacional (5,5%).
- Las pernoctaciones: durante estos dos meses se ha registrado un aumento del 7,5%, debido al crecimiento del 9% de turistas extranjeros y al 5,6% de viajeros españoles.
- Málaga encabeza este repunte con un incremento de un 9,25% en el número de viajeros alojados y un 10,13% en las estancias. En junio, Andalucía ha recibido más de 1,5 millones, un 3,5% más (51.500 viajeros) que en 2012. El sector espera que de junio a septiembre más de 6,4 millones visiten Andalucía y que haya más de 20,5 millones de pernoctaciones.
R. La duda era ver cómo respondía el mercado nacional, porque no teníamos ningún parámetro que apuntara a una reacción positiva. Y sí, la ha habido respecto a los meses de mayo y junio del año pasado, pero puntualmente. Las familias mantienen, pese a las dificultades, sus días de vacaciones, pero de otra manera. Se acortan distancias y días y eso para la Costa del Sol es bueno, porque se ve como un destino cercano y muy completo en su oferta. La tendencia es buena, pero hay que esperar a ver cómo se da agosto, un mes donde lo que impera es el mercado nacional. No hay que quedarse con los datos buenos del arranque ya que un pinchazo en las cifras de agosto es un reventón para todo el año.
P. Usted aboga por recuperar la marca Costa del Sol y reforzarla en los planes de promoción turística. ¿No sirve ir de la mano de la marca Andalucía?
R. Hay un debe importante en nuestro destino y es que no hemos sabido modernizar la marca Costa del Sol. Fuera hay una imagen de destino maduro pero con cierto aroma obsoleto, algo que no se corresponde con la realidad porque si hay un destino que ha evolucionado es el nuestro. Contamos con una red de infraestructuras inmejorable y una planta hotelera que en 20 años ha pasado de tener más del 50% de las camas en hoteles de tres estrellas a más del 50% en hoteles de cuatro y cinco estrellas. Otro factor fundamental es que el viajero busca experiencias, algo que en la Costa del Sol tiene garantizado por su amplia oferta complementaria en turismo cultural, gastronómico, náutico o de golf y que en otros destinos que pueden ser competencia como Canarias, Baleares o fuera de nuestras fronteras no tienen o la están creando.
P. Entonces, ¿qué le pide al Plan de marketing que ultima la Junta y que marcará la promoción de Andalucía hasta 2016?
R. De hace unos dos años para acá se está trabajando en esta línea de potenciar la marca Costa del Sol y reforzar la posición que nos hemos ganado en más de cinco décadas de experiencia. Hace unos años desde la Junta se apostó por promover la marca Andalucía, algo que no entraba en conflicto con la existencia de otras marcas. Pero con el tiempo esa filosofía ha ido cambiando. Lo que le pedimos a la Consejería de Turismo es que si bien la marca Andalucía es algo a explotar como destino conjunto, esto no puede ser a costa de anular otras de gran trayectoria y prestigio. Como ejemplo le pongo el mercado ruso, ya no emergente, sino una realidad que lo que viene buscando no es lo que ofrece la marca Andalucía, sino lo que les da la marca Costa del Sol.
P. ¿Qué tipo de medidas deben adoptar las administraciones para evitar que esta industria pierda competitividad?
R. Las administraciones se olvidan de que los hoteles son empresas. La crisis nos está llevando a que las rentabilidades del verano no sean suficientes para compensar las pérdidas del invierno. Por eso consideramos que si se ve al turismo como motor de la economía deben impulsarse actuaciones económicas y fiscales que eviten que esta industria pierda competitividad justo al final de una crisis a la que se le mantiene el pulso con mucho esfuerzo empresarial.
P. ¿Qué otras destacaría?
R. Urge una fiscalidad especial y una reducción de los costes laborales en temporada baja con la que los hoteleros sintamos ese apoyo y comprensión que vemos que tienen con otros sectores y no con el que aporta el 12% del PIB. Estas actuaciones no solo beneficiarán al sector y al empleo, sino que generarán más riqueza para las arcas estatales. Por ejemplo, sería preciso analizar que la actualización del IBI ha supuesto para los hoteles de la Costa del Sol un daño tremendo debido un aumento del 25%, o que el paso del 8% al 10% del tipo impositivo del IVA ha lastrado en un 20% los beneficios de las empresas. Esto estaba en el programa electoral del partido que gobierna y no se ha sido sensible a las demandas del sector, que aboga por un IVA superreducido.
P. ¿Ayudarían estas medidas a no tener que cerrar en invierno?
R. Sí. Medidas como estas ayudarían a combatir la estacionalidad, que se ha disparado del 15% al 35%, porque reduciríamos costes. Vamos a un cierre en la temporada de invierno que este destino no se merece. Y no pedimos subvenciones, pedimos ayudas fiscales como poder aplazar a la temporada alta, cuando tenemos liquidez, las cuotas de los trabajadores a la Seguridad Social, pero sin el 20% de recargo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.