_
_
_
_

Un ojo vale 129.701 euros

El hombre que se quedó tuerto tras recibir un disparo en la Puerta del Sol recurrirá la indemnización del Ayuntamiento por considerarla “muy baja”

F. Javier Barroso
Antonio Castro Pimentel, en su fabrica de ventanas de Priego de Córdoba.
Antonio Castro Pimentel, en su fabrica de ventanas de Priego de Córdoba.FRANCIS VARGAS

Antonio Castro Pimentel reconoce que está “decepcionado” y “muy harto de todo”. Han pasado más de tres años desde que recibió en plena Puerta del Sol un disparo en el ojo izquierdo que le dejó sin visión. Un policía municipal repelió la agresión de un hombre que le atacaba y la bala salió rebotada hasta la cara de Castro. El Ayuntamiento de Madrid (Partido Popular) le ha indemnizado, a través de su aseguradora, con 129.701 euros, pero él pedía la misma cantidad que solicitó la fiscal en el procedimiento penal, más de 300.000 euros, a los que se sumaban otros 22.000 por gastos de desplazamiento. El afectado asegura que acudirá a la vía contencioso-administrativa para conseguir una indemnización mayor.

Todo ocurrió la tarde del 6 de mayo de 2010, cuando Antonio Castro paseaba con su esposa y sus dos hijos por la Puerta del Sol. Un hombre con problemas psiquiátricos, Santiago M. B., la emprendió a golpes con un coche patrulla de la Policía Municipal. Un transeúnte avisó a cuatro agentes que estaban en la calle del Arenal, que se dirigieron a reducir al atacante. Este sacó un cuchillo de 10 centímetros de hoja y se enfrentó a los policías. Según explicó en el juicio, quería que lo mataran los agentes.

Más información
Dos heridos graves en un tiroteo en Sol
El juez deja en libertad al policía municipal que disparó contra un supuesto atacante en la Puerta del Sol
El hombre herido en el tiroteo de Sol pierde la visión en el ojo izquierdo
"Vi la bala venir", dice en el juicio el herido en el tiroteo de Sol
La fiscal rebaja la petición de pena al agresor del tiroteo de Sol pero mantiene la del agente
"Quería que me mataran, porque yo no me atrevía a suicidarme"
Absuelto el policía que hirió en un ojo a un peatón en la Puerta del Sol
“Me dejaron como a un perro”

Uno de ellos, Israel S. V., sacó su arma reglamentaria y efectuó tres disparos. Uno salió rebotado tras golpear el suelo y estalló el globo ocular de Antonio Castro. Este cayó al suelo y comenzó a sangrar de forma abundante. Cinco días después, los médicos confirmaron que había perdido la visión en ese ojo.

El caso fue enjuiciado a principios de 2012 en la Audiencia Provincial de Madrid. Los magistrados entendieron que no había responsabilidad penal por parte del agente, que actuó con “los principios de congruencia, necesidad y proporcionalidad”. La consecuencia fue que, al no existir delito ni falta, tampoco había responsabilidad civil del agente y mucho menos del Ayuntamiento. Y esto se traducía en que Castro Pimentel se quedaba sin recibir ni un euro de indemnización.

El herido pidió al Ayuntamiento de la capital la misma indemnización que la fiscal solicitaba como indemnización patrimonial por los daños sufridos. “Al principio me ofrecieron 150.000 euros, pero le era poco dinero. A lo más que han llegado es a 180.000 euros, que no se acerca ni de lejos a lo que yo pedía. En todo momento les hemos dicho que no, hasta que han sido ellos los que han fijado la cantidad de manera unilateral”, se queja este vecino de Priego de Córdoba, de 54 años.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Castro Pimentel recuerda que ha tenido que viajar en 44 ocasiones a Madrid para someterse a numerosas pruebas y revisiones. “Solo este año ya me han operado tres veces para colocarme la prótesis que llevo puesta. Y en breve tendré que ponerme otra, que cuesta 1.800 euros”, añade.

El Ayuntamiento de Madrid le ha abonado ya una parte de la indemnización, entre la que se incluyen 8.000 euros por gastos de viajes y hospedaje. Fuentes municipales explicaron que se le ha pagado “mucho más” que el baremo establecido. La decisión se tomó el pasado 18 de junio, que fue cuando se le notificó al afectado.

Castro ha anunciado que acudirá a los tribunales para poder resarcir el daño que ha sufrido y las nefastas consecuencias del disparo del policía municipal. “Dentro de poco tendré que entrar de nuevo al quirófano y tengo unos dolores enormes. No tengo ni gusto ni olfato y solo veo por un ojo”, recuerda Castro, que se dedica al negocio de persianas.

“La única vía que ya me queda para que se me dé todo lo que realmente debo es ir a la vía contencioso-administrativa. No pararé hasta que algún juez me dé la razón y realmente se haga justicia. Es lo mínimo que pido tras haber cambiado mi vida de arriba abajo”, concluye Castro.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_