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Los bomberos privados de A Coruña cobrarán un 25% menos si cogen una baja

200 trabajadores de los parques comarcales protestan por el recorte de derechos

Manifestación de bomberos ayer en Bergondo
Manifestación de bomberos ayer en Bergondo GABRIEL TIZÓN

“En una profesión como la nuestra, que arriesgamos el físico, los accidentes son habituales. Si hoy me lesiono en un rescate ya no cobraría el 100%. Pasaría de 1.150 euros líquidos a 800 escasos”. José Luis Pareja, bombero en Ordes y portavoz del Comité de Empresa de Veicar, SL, la concesionaria de los siete parques comarcales de A Coruña, resume así el nuevo escenario laboral que les espera a los 120 bomberos que trabajan en estas instalaciones de Arzúa, Arteixo, Betanzos, Boiro, Carballo, Ordes y Ribeira.

Desde que se aprobó la reforma laboral, el colectivo tenía el 8 de julio marcado en rojo en el calendario. El domingo dejó de tener vigencia el convenio colectivo por el que se regían y únicamente los ampara el Estatuto de los Trabajadores. Sus derechos laborales han ido a menos. El tijeretazo en la nómina por una baja médica al perder el complemento por incapacidad temporal (-25%) no es el único cambio “sustancial” en sus condiciones de trabajo. Pierden el plus de transporte y a partir del 1 de agosto tendrán nuevos horarios (de seis y ocho horas) en turnos de mañana, tarde y noche y guardias móviles a criterio de la empresa que son difícilmente compatibles con la conciliación familiar, denuncia Pareja. “No sabemos ni cuándo vamos a comer ni a dormir ni a descansar”, lamenta Xabier Vidal, presidente del Comité, que suma nueve delegados de CIG, CCOO, UGT y Sibgal, un sindicato independiente que tiene la mayoría.

Contra todo esto se concentraron ayer a mediodía en Bergondo unos 200 bomberos de toda Galicia. Acudieron con la ropa de trabajo y el casco puesto para sumarse a una protesta pacífica pero muy ruidosa que arrancó en el cruce de la Nacional VI, entre A Coruña y Betanzos, y discurrió hasta las puertas de la nave que la compañía tiene en el polígono. A su movilización “por un convenio justo”, la plantilla se llevó también a sus parejas e hijos. “Mi padre es bombero, no un negocio”, se leía en una de las pancartas que los más pequeños aportaron a la marcha. “Las familias que dependen de nosotros son las van a padecer las consecuencias”, resume José López, representante de la CIG. Cuenta que en Galicia hay unos 400 bomberos repartidos entre 23 parques de gestión indirecta. Mientras un centenar se quedaron trabajando para cubrir las guardias, otros 200 compañeros se fueron a protestar .

Veicar, Vehículos y Carrocerías SL, es la compañía que explota la mitad de los parques comarcales de Galicia, 12 de 23. Vinculada al sector de la automoción y la maquinaria (autobombas forestales), acabó por acaparar siete de los 10 parques coruñeses. Emplea a 120 bomberos que prestan servicio a 50 municipios “Este circo empezó cuando la UE dio fondos para crear los parques. El plazo se acababa sin que arrancara el servicio público así que la Xunta lo sacó a concurso y ahora se desentienden”, explica Pareja.

El primero se abrió en A Rúa en 2002 para la zona de Valdeorras. Además de los 10 de A Coruña, Veicar se llevó el gato al agua en tres de los seis parques de Lugo y en dos de tres en Ourense. Ninguno en Pontevedra. La caminata por Bergondo fue el primer escalón de un calendario de movilizaciones condensado en pocos días (del 8 al 22 de julio) que pasa por presentar una avalancha de demandas individuales y colectivas contra Veicar por la “distribución irregular de la jornada”. El día 22 está convocada una huelga indefinida en pleno estío y tras una intensa ola de calor que ha resecado montes y pastizales. Antes, y si la empresa no rectifica, se encerrarán 24 horas en cada uno de los siete parques afectados.

El comité de empresa se desmarcó ayer de los actos vandálicos del fin de semana en cuatro centros de trabajo y pidió calma a la plantilla En Arteixo, un equipo de excarcelación quedó inutilizado y se contaron desperfectos en ruedas y coches. Antes de llevar a empresa al juzgado, Veicar les pagaba la hora extra de trabajo a 3,50 euros netos, muy por debajo del precio ordinario (11 euros brutos). “Lo denunciamos porque consideramos que era ilegal y esto ya lo están corrigiendo”, precisa el portavoz del comité de empresa.

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