Puig acusa al PP de usar la crisis para dar “un paso atrás” en el Estado autonómico

Con la mirada puesta en el Consejo Territorial que el PSOE celebrará la próxima semana en Granada, el secretario general de los socialistas valencianos, Ximo Puig, advirtió este sábado contra el inmovilismo y acusó al PP de intentar incluso retroceder. El dirigente aludió a quienes “no votaron la Constitución” y podrían aprovechar ahora la crisis para “dar un paso atrás” en el Estado de las autonomías. “No lo vamos a permitir”, añadió en su discurso ante el Comité Nacional del PSPV-PSOE, que se reunió para aprobar dos resoluciones: una que propone crear un fondo contra la pobreza y la exclusión social a partir del 1% del presupuesto de la Generalitat Valenciana, y otra para apoyar la reforma de la Constitución con una orientación federalista.

La resolución federalista, que a última hora acabó resumiendo en cuatro folios un amplio documento de profundas implicaciones territoriales, plantea la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica y propone la creación de un Fondo de Garantía del Estado del Bienestar que, imitando el modelo del fondo de reserva de la Seguridad Social, recaude en épocas de bonanza para que la crisis no sirva de excusa a los recortes sociales. También aboga el documento por la reforma del Senado como Cámara de representación de las comunidades autónomas y por la posibilidad de que las autonomías puedan suprimir las diputaciones.

“Para salir de la crisis económica, y de la crisis social, hemos de resolver nuestro encaje en España, tenemos que apostar por un proyecto de convivencia democrática y de financiación igualitaria entre todos los territorios, es decir, un federalismo integrador”, aseguró Puig ante los 171 asistentes al Comité Nacional, y acusó al PP y al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, de estar cumpliendo “una agenda contra la sociedad valenciana”. Puig destacó que el PSPV-PSOE sí que ha cumplido su objetivo de convencer a la dirección del PSOE de la necesidad de modificar el sistema de financiación autonómica. La Comunidad Valenciana “ha sido una de las menos beneficiadas” por el actual modelo, llegó a decir el líder de los socialistas valencianos, que de todas maneras puntualizó que el Gobierno del socialista José Luis Rodríguez Zapatero buscó la manera de paliar el problema e invirtió más que ningún otro en territorio valenciano.

“El PP está inmerso en un proceso enorme de corrupción”

Puig, que recordó en su intervención los graves incendios forestales de hace ahora un año, así como a las víctimas del accidente del metro de Valencia, del que se cumplirán siete años el próximo miércoles y que él llevará al Congreso de los Diputados en una iniciativa parlamentaria, arremetió contra la corrupción. “El PP está inmerso en un proceso enorme de corrupción, de división y autodestrucción”, aseguró, tras indicar que los “sobresueldos y los sobres han sido práctica común”, desde Mariano Rajoy a Esteban González Pons.

En un pasaje de su discurso repasó los escándalos que afectan a los populares valencianos y criticó que Rafael Blasco fuera expulsado del Grupo Popular por unas declaraciones contra Fabra y no por el fraude del que está acusado. Puig dijo que la Consejería de Solidaridad que dirigió Blasco sufrió “el desastre más grave desde el punto de vista ético” porque se desvió dinero de la cooperación, que estaba destinado a los más pobres.

El dirigente socialista colocó a su partido en “una situación de pregobierno”, dijo que “hay que mirar a la sociedad y mirarse poco o nada al espejo”, y añadió: “Somos la única esperanza que de verdad tiene el pueblo valenciano para que haya un cambio real”. Para apoyar esa idea recordó que “no hay encuesta que no pronostique cambio”.