La selectividad arranca con textos de Savater y la narrativa hispanoamericana

Los estudiantes de la Comunidad de Madrid son los primeros, junto con Asturias, en enfrentarse a las pruebas de acceso a la universidad, que han arrancado esta mañana. Alrededor de 29.000 estudiantes se someten durante cuatro días al examen que consta de dos fases, una obligatoria de conocimientos generales, y otra voluntaria, para subir nota. Las seis universidades públicas madrileñas ofertan 45.062 plazas.

A las diez de la mañana ha empezado el examen de lengua con un comentario de texto del filósofo Fernando Savater sobre la admiración por la excelencia en la opción A, y un texto del escritor argentino Marcos Aguinis sobre la lectura y los recuerdos de infancia en la opción B. Después de esta prueba, los estudiantes se han examinado de Historia de España o bien Filosofía, mientras que por la tarde harán la prueba de Lengua Extranjera. Les ha caído la primera guerra carlista, el absolutismo en el reinado de Fernando VII o el referéndum de la transición democrática en el examen de Historia de España, y fragmentos de Aristóteles y Hume en la prueba de Filosofía.

A los habituales nervios y estrés se suma la preocupación por las tasas. Cada vez encuentran más problemas para pagar unos estudios cuyo precio es, para muchos, inaccesible. Las tasas de matrícula en la Comunidad de Madrid han subido un 38% en el último año, es decir, que el precio de cada crédito ha subido una media de seis euros.

Pedir una beca no parece ser tampoco la salvación. Para el curso 2013-2014, el Ministerio de Educación exige una nota media de 6,5, un punto más que el curso actual. Antes del decreto de recortes del Gobierno en materia educativa, tan solo se pedía un aprobado, es decir, un cinco. Presentarse al propio examen representa ya un gasto. De media cada alumno tiene que pagar más de 100 euros en tasas para poder hacerlo.

Las carreras relacionadas con la salud, como Medicina, Veterinaria o Enfermería, son las de mayor coste. En la Universidad Complutense cuesta 27,47 euros por crédito en la primera matrícula, 50,53 la segunda y 94,75 la tercera.

El año pasado la carrera más solicitada y con la nota de corte más alta de todas las titulaciones de las universidades españolas fue el doble grado en Física y Matemáticas de la Complutense, con un 12,934. A este grado solo consiguieron acceder 25 alumnos con las notas más altas en la selectividad. Le sigue Medicina también en la Complutense con un 12,499 y la Universidad Autónoma de Madrid con el mismo grado con un 12,424.

Esta convocatoria de selectividad es una de las últimas. Si sale adelante en los términos actuales la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa, que acaba de iniciar su trámite parlamentario, se sustituirá por una evaluación externa al término del segundo curso de Bachillerato que también tendrá dos convocatorias (junio y septiembre) y que el alumno deberá aprobar para poder acceder al título.

Este examen, que los sectores críticos tildan de "reválida", hará media con la nota obtenida en Bachillerato y tendrá un peso del 40% sobre la calificación. Además, esta prueba no abrirá directamente las puertas de la universidad, pues los centros podrán establecer sus propias pruebas de selección de alumnos.