Clamor contra la financiación injusta

La tarde pintaba mal, lluviosa y desapacible, pero al final la manifestación nacionalista con motivo del 25 d'Abril fue concurrida. Miles de personas recorrieron este sábado el centro de Valencia detrás de una gran pancarta que decía Per un finançament just per al País Valencià.

Numerosas banderas cuatribarradas e independentistas surcaban la riada de gente que comenzó a marchar después de que la niña ecuatoriana Kelly coronase la torre humana formada por muixaranguers de Valencia, Algemesí i Camp de Túria. “Empecé a hacerlo por unas amigas... Y no me da miedo, eh”, comentó risueña la enxaneta, ya desprovista del casco.

“Hoy estamos aquí porque hace 306 años de Almansa, la batalla en la que perdimos nuestras leyes y nuestro autogobierno. El mal de Almansa aún nos afecta”, proclamaba el manifiesto que leyeron dos las periodistas Reis Juan, de la plataforma de despedidos por el ERE en RTVV, y Salut Alcover, presidenta del comité de esta empresa, Salut Alcover.

"Padecemos los efectos de una sistema de financiación injusto, que obliga a pagar más de lo que recibimos aunque estamos por debajo de la media de la renta estatal", continuaba el manifiesto.

"La cosa es flagrante y perjudicial para toda la gente, por eso hemos de pedir todos juntos una nueva financiación [autonómica] que el PP y el PSOE no han conseguido en el Gobierno”, comentaba el escritor Joan Francesc Mira, presidente de Acción Cultural del País Valencià (ACPV), organizadora de la convocatoria, que ha contado con la colaboración de los principales sindicatos de clase las plataformas por la ley de Dependencia, La Fe en Campanar, los despedidos de RTVV (Mildenou) y la Cimera Social. Además, se adhirieron la Plataforma per l'ensenyamet, Xúquer Viu y otras entidades.

Hubo una nutrida representación de Esquerra Unida, encabezada por su líder Marga Sanz, y algunos destacados miembros de Compromís, como el diputado en el Congreso, Joan Baldoví. Del PSPV se vio a Matías Alonso, que asistió como miembro de la plataforma por La Fe. También era abundante la comitiva de Esquerra Republicana del País Valencià.  

El fundador de ACPV, Eliseu Climent, señaló que precisamente "el descalabro" de aquel 25 abril de 1707 en Almansa lleva a los valencianos hoy día a "la reclamación de más justicia fiscal". "Son 22.000 millones de euros los que pedimos catalanes, valencianos y baleares, que nos debe el Estado, con los que no habría crisis", agregó, según recoge EFE.

Por su parte, el coordinador de ACPV, Toni Gisbert, insistió en la necesidad de ese cambio en el modelo de financiación para salir de la crisis y ha urgido al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, a que "defienda los intereses de los valencianos" en lugar de "plegarse a los dictados de Madrid". Gisbert cifró la afluencia en 25.000 personas. La Policía Local no dio ninguna estimación.

El secretario general de CC OO, Paco Molina, apuntó que la marcha pretende reivindicar las señas de identidad del pueblo valenciano y advirtió también de que "no puede haber modelo social sostenible que atienda las necesidades de las personas si no hay una financiación justa". En esta misma línea, el secretario de organización de UGT-PV, Carlos Vila, indicó que es una jornada de "lucha y reivindicación de los derechos" que un "Gobierno centralista nos está robando".

La manifestación concluyó con el sonido de la muixeranga.