Los dirigentes de Cádiz promueven una gran plataforma logística de Europa

El planteamiento de la idea es sencillo: convertir Cádiz en el centro del comercio y transporte de mercancías entre Europa, África y América. Pero hacer realidad este objetivo es más complicado. Las administraciones gaditanas aspiran a que la provincia aproveche su idónea posición estratégica entre continentes para convertirse en la plataforma logística del sur de Europa. Sobre el papel todos apoyan esta iniciativa. Pero los recelos políticos y la falta de inversión en nuevas infraestructuras, las necesarias para hacer viable el proyecto, lastran las pretensiones de la meta marcada.

Que Cádiz sea centro del intercambio de mercancías con América sería recuperar la historia, la que este puerto vivió en el siglo XVII y XVIII con el esplendor del comercio con las Indias. El auge y caída de la ciudad ha tenido mucho que ver con el mantenimiento y la pérdida de esta capitalidad marítima.

La alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, tras superar el reto de conmemorar el bicentenario de la Constitución de 1812, se marcó a principios de este año el objetivo de potenciar esta plataforma logística. Lo ha presentado casi como un proyecto personal, al que le han seguido, lógicamente, los cargos públicos de su partido, el PP, que han encontrado en este plan un repertorio de promesas de futuro, ideal para seguir enviando mensajes electorales tras agotar las posibilidades del doble centenario de la Carta Magna. Teófila Martínez ha plasmado en apenas dos meses su proyecto en encuentros con los alcaldes de Jerez y Algeciras, el presidente de la Diputación o la ministra de Fomento, Ana Pastor. Todos de su mismo partido

La monopolización política que el PP ha hecho del proyecto de plataforma logística del sur ha provocado resquemor en la Junta de Andalucía, gobernada por PSOE e IU, y esencial para hacer realidad esta meta. Ambos partidos respaldan la idea pero le han recordado a la alcaldesa de Cádiz que ni la idea es nueva ni tampoco es suya. De hecho, los socialistas se apresuraron a recordar que Manuel Chaves ya ofreció esa posibilidad cuando todavía era presidente de la Junta de Andalucía.

Fue el 20 de mayo de 2006 cuando en un encuentro de la Organización de Estados Americanos planteó que el núcleo bahía de Algeciras y bahía de Cádiz recuperaran la relación comercial con un gran proyecto logístico. También apoyó la creación de una red hispano-marroquí para potenciar las conexiones con el norte de África. Fue la base para iniciar la Zona de Actividades Logísticas de Algeciras, que, según el Gobierno andaluz, ha sido clave para mantener el poderío del puerto algecireño frente a la cada vez más potente competencia de Tánger-Med.

El puerto marroquí aspira a hacerse fuerte en el Mediterráneo mientras que los muelles holandeses de Rotterdam y Ámsterdam siguen acogiendo gran parte del comercio con América con entrada a Europa.

Según el último informe de la ESPO, la organización europea de puertos, los muelles de Rotterdam lideraba el transporte de mercancías con 527 millones de toneladas registradas de tráfico total en el último año, mientras que Algeciras incrementaba su negocio y se quedaba como el segundo puerto del sur de Europa, por detrás de Marsella, con 76 millones.

Rotterdam consiguió consolidarse como el mayor puerto de Europa tras una ampliación hace 40 años, que reconvirtió unos humedales en un complejo industrial enorme, el Europort, que permitió soportar su crecimiento, a lo que sumó una fuerte inversión en conexiones por carretera y tren hacia el centro de Europa, fundamentalmente hacia Alemania.

El proyecto que ahora se quiere recuperar en Cádiz suma activos ya consolidados: los puertos de Algeciras, Puerto Real y Cádiz, el aeropuerto de Jerez, las industrias naval y aeronáutica, las conexiones por carretera, los polígonos industriales o la existencia de una Zona Franca.

Pero tiene un reto pendiente: la conexión ferroviaria. Y, aunque el Gobierno ha respaldado públicamente la iniciativa emprendida ahora por la alcaldesa de Cádiz, ese apoyo no se ha materializado todavía en inversiones para mejorar el transporte por tren hacia Algeciras.

El corredor mediterráneo, apoyado por financiación europea, ha favorecido hasta ahora al puerto de Valencia. Empresarios, sindicatos y Junta de Andalucía recordaron la pasada semana a la ministra Ana Pastor que conseguir la plataforma logística del sur de Europa requiere del dinero necesario para mejorar esa cuenta pendiente con el ferrocarril en Algeciras. También con Puerto Real y su muelle de la Cabezuela.

Y falta también un gran polígono industrial en la bahía de Cádiz. Hay uno diseñado, el de las Aletas, pero problemas legales dificultan su puesta en marcha y cuestionan seriamente su viabilidad. Curiosamente, al igual que en Rotterdam, también se ha proyectado en unos humedales.