El Gobierno dice que el canje de preferentes es “lo más generoso posible”
Para el secretario de Estado, Fernando Jiménez Latorre, la solución facilitada por el ejecutivo a este problema "es satisfactoria si se compara con otros casos ocurridos dentro de la UE"
El secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, ha asegurado que los canjes de preferentes son "lo más generosos posible, porque convierten a los titulares de estos productos en accionistas, y de esa forma se aligera su carga para sanear la entidad".
Durante su intervención en la Comisión de Economía del Senado, Jiménez Latorre ha recordado que las normas de la UE sobre las quitas a los tenedores de productos híbridos "son muy estrictas", y ha indicado cómo se deben soportar esas cargas, "empezando por los accionistas, después por los titulares de preferentes, los titulares de deuda subordinada perpetua y por último los tenedores de deuda subordinada a vencimiento".
Según el secretario de Estado, la solución facilitada por el Gobierno español a este problema "es satisfactoria si se compara con otros casos ocurridos dentro de la UE, donde los titulares de estos productos han asumido más cargas para sanear las entidades en cuestión". Jiménez Latorre ha defendido la supervisión llevada a cabo por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la comercialización de estos productos, "pues cuando ha identificado casos de mala práctica los ha sancionado". Además, considera que con los procesos de arbitraje que se han llevado a cabo "se ha hecho un esfuerzo significativo para dar una solución rápida para los casos más llamativos". "El Gobierno es muy consciente de este problema, que es heredado, y ha intentado dar la mejor solución a los casos más significativos", ha subrayado el secretario de Estado, quien ha recalcado que al sistema financiero también se le está pidiendo que ayude a soportar esas cargas".
El pasado viernes el FROB anunció que los inversores sufrirán una quita en su dinero. Los afectados que tengan participaciones preferentes lograrán cambiar esos complejos títulos de inversión por acciones de esos bancos, pero con recortes sobre el valor invertido que oscilan entre 10% y el 70%. Y los 400.000 accionistas de Bankia, protagonista del mayor fiasco bancario español, lo perderán prácticamente todo: el valor de sus acciones quedará fijado en torno a un céntimo, lo que supone una caída del 95% respecto al precio al que cerraron este viernes en Bolsa, dos céntimos y medio. La pérdida da más escalofríos al comprar el precio con su debut en el parqué bursátil, en julio de 2011, a 3,75 euros.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.